El próximo 22 de junio, Tafalla será el escenario del Euskal Herria Kantuz, una cita anual que reúne a Kantuz procedentes de distintos rincones de Euskal Herria. Esta fiesta, que nació hace casi dos décadas como una expresión de resistencia cultural, tiene hoy como objetivo recuperar el hábito de cantar en euskera en la calle, dinamizar el espacio público y reforzar los lazos comunitarios a través de la música.
Este año, la “responsabilidad y el orgullo” de ejercer de anfitriones recae en Tafalla Kantuz, el grupo local que lleva ya nueve años consolidando una forma muy particular de entender y compartir el canto popular euskaldún. Aunque sus orígenes se remontan a una iniciativa modesta en el marco de las Fiestas de Tafalla, hoy en día es un grupo referente, no solo por su actividad, sino también por el entusiasmo con el que contagian al público y por el nivel de sus músicos.
Tafalla Kantuz nació de forma espontánea, como tantas otras experiencias culturales, empujado por el deseo de un grupo de personas de sacar el euskera a la calle a través de las canciones. Durante los primeros años, participaban únicamente durante el Día del Euskera en fiestas, con una actuación previa al grupo de danzas Patxi eta Konpainia. El formato era sencillo: un rato de canciones, buena compañía y algo de comida en la barraca de la Ikastola. Pero la semilla estaba plantada.
Todo cambió en 2016, cuando Juan Jesús Marco, tafallés de origen y vecino durante décadas de Mendillorri, volvió a su pueblo con la idea de dar un paso más. Había conocido de cerca los Kantuz de Iruña y creyó que Tafalla podía tener su propio calendario estable. La propuesta fue sencilla: salir a cantar al menos cinco veces al año, una por cada cambio de estación y otra durante las fiestas patronales.
En junio de ese año se celebró la primera ronda bajo el nuevo formato. La acogida fue excelente. Se había logrado reunir a un grupo de músicos excepcionales, con nombres como Iñigo Aguerri, Blanca la Magaña, Floren, Txisko, Javierico, Arturo, Xabi o José Javier. La música en directo elevó la experiencia y el canto compartido se convirtió en una cita esperada por muchas personas.
Desde entonces, Tafalla Kantuz edita su propio Kantutegi –un cancionero con más de cien canciones tradicionales y actuales–, que se vende durante las rondas. Las canciones se cantan al unísono, sin voces ni ensayos previos. “Nunca se ha ensayado, esta gente es de otro nivel”, reconocen desde la organización. Se alternan canciones lentas con otras más alegres, adaptándose al ambiente del momento. No faltan temas clásicos como Txoria-Txori, Xalbadorren Heriotzean o Gernikako Arbola, junto a otras más actuales como Zurekin batera, del grupo ETS, para atraer también a las generaciones más jóvenes.
Una red que recorre Euskal Herria
El Euskal Herria Kantuz nació en 2006 como respuesta al cierre del diario Egunkaria. Aquella Kantu Gira inicial fue tan potente que se decidió continuar organizando un gran encuentro anual en diferentes localidades. Así surgió la Red de Euskal Herria Kantuz, con el compromiso de celebrar cada año esta jornada de canto en un lugar distinto. Se han vivido días muy especiales, como el celebrado en Tudela en 2012, que demostró que el canto en euskera podía resonar también en lugares donde no siempre tiene presencia mayoritaria.
Este año, Tafalla asume ese reto. Para Tafalla Kantuz, la cita supone un" reconocimiento al trabajo de años", pero también una oportunidad para mostrar su pueblo y su cultura a las cerca de 800 personas que se espera que acudan desde lugares como Usurbil, Arrigorriaga, Asteasu, Barakaldo, Biarritz o Baiona. “Es un escaparate para Tafalla, una oportunidad turística y cultural”, señalan sus organizadores.
Además del canto, Tafalla Kantuz ha promovido la creación de nuevos grupos en otras localidades. Han ayudado a poner en marcha Kantuz en pueblos como Lerga, Irunberri, Ujué o, próximamente, San Martín de Unx. “Es una cadena, una forma de extender algo tan básico como cantar juntos en la calle”, explican.
El programa del 22 de junio
La jornada comenzará a las 11:00 con la llegada de los distintos grupos a la plaza. A las 12:00 se leerá el mensaje de bienvenida y se rendirá homenaje a Fermín Balentzia. A las 12:30 arrancará la kantu jira, un recorrido musical por las calles del centro. Alrededor de las 13:30 tendrá lugar el cierre de la ronda con los gigantes de Tafalla, con quienes Tafalla Kantuz colabora desde hace unos años.
A las 14:30, la fiesta se traslada al Ereta, donde se celebrará una comida popular. Ya por la tarde, a partir de las 16:30, continuará la sobremesa musical con actuaciones de Josu Aiesa, Fermín Balentzia y la Coral Ganbera. Para cerrar el día, sobre las 18:30, actuará el coro de cámara Heptamerón, un grupo de mujeres de la Coral de Pamplona que rendirá un pequeño homenaje a la Coral Uxoa.
El mensaje que se repite a lo largo de toda esta experiencia es claro: cualquiera puede participar. No hace falta saber música, ni tener experiencia. Basta con ganas de cantar. Porque como dicen en Tafalla, si canta Tafalla, canta Euskal Herria.
