Estella pondrá fin al aparcamiento ilimitado de los coches eléctricos en la zona de estacionamiento limitado a 90 minutos que funciona desde 2019 y permitirá media hora los aparcamientos en la zona del casco antiguo, tanto para vecinos como para usuarios de los locales comerciales. Una medida que permitirá gestionar las posibilidades de aparcamiento de una ciudad que cuenta con 9.400 vehículos, además de los que “nos visitan y que también pueden aparcar”, aseguró en el pasado pleno de octubre el concejal Santos Mauleón.
Una ordenanza que salió adelante con los siete votos de su grupo más el del PP. Y gracias a la abstención de EH Bildu, PSN y Geroa Bai cuya concejala Blanca Regúlez se quejó de la pérdida que supone esta medida para la electrificación del parque automovilístico. En contra, de esta medida que fue calificada también por la oposición de “muy bien trabajada por parte del concejal Mauleón”, se posicionó el único concejal de Contigo-Zurekin quien defendió que en el casco antiguo “se priorice lo peatonal. Este es un sistema de control y sanción”, finalizó. Con todo, la propuesta ampliará el flujo de aparcamientos lo que permitirá una mayor rotación y que este servicio gratuito sirva para una mayor movilidad.
Novedades
Otra de las novedades que se pondrán en el futuro, es la inclusión de la zona de la Cuesta de Entrañas, que pasará a ser zona ZEL con lo que se habilitarán 35 plazas para la rotación con lo que Estella contará con 214 plazas, además de la brevedad en los aparcamientos tras la suspensión de que los vehículos eléctricos (437 solo en Estella-Lizarra) tengan que entrar en la rotación.