Este viernes por la noche Amaiur se convirtió en Noain, y regresó en el tiempo hasta el 30 de junio de 1521. Muchísima gente acudió a la campa preparada para revivir la batalla campal que tuvo lugar durante la conquista de Navarra por parte de Castilla y Aragón. En ella se enfrentaron las tropas del ejército navarro que tenían el apoyo del francés, que habían reconquistado Navarra, al ejército castellano.

500 años más tarde, en Amaiur, también hubo dos frentes, por un lado el bando más numeroso, formado por un público expectante, por otro lado decenas de profesionales de la música, del baile y de la interpretación.

La batalla de hace 500 años fue muy larga y sangrienta, por el contrario, la revivida en Amaiur fue menos beligerante y se hizo corta para los espectadores, que disfrutaron del excepcional espectáculo multidisciplinar, gracias a la música de Euskal Herriko Txistulari Elkartea, los bailes del grupo de danzas Oberena, al montaje audiovisual a cargo del director Xavi Berraondo, que se visionó en una pantalla gigante, y al hilo conductor de la mano de la actriz Ventura Ruiz. La música, las danzas, la narración y las imágenes se acoplaron perfectamente, transportando al público a 1521, a Noain, al campo de batalla. La belleza del espectáculo se fusionaba con la dureza de la batalla, del sufrimiento y la frustración de la derrota, aunque también hubo momentos coloridos, guiños a la esperanza, como el baile de la sagardantza.

Un espectáculo con mayúsculas, en el que no hubo vencedores ni vencidos, y los dos bandos se unieron a través de una gran ovación final.

AMAIUR 2022 En Amaiur también recuerdan con tristeza la batalla de Noain. Se puede decir que fue el capítulo previo al vivido en la pequeña localidad un año más tarde. Precisamente hace pocos días se cumplieron 499 años desde que el 12 de agosto de 1522 las tropas castellanas dinamitaron el Castillo de Amaiur cumpliendo la orden del Virrey de Navarra Francisco de Zuñiga y Avellaneda.

Han pasado casi 500 años desde entonces, pero en Amaiur recuerdan esas fechas, esos hechos. Siempre supieron de la existencia de la batalla y del castillo, hasta que hace 16 años decidieron que no bastaba con tenerlo en la memoria, quisieron verlo, excavar en la historia de Amaiur. Para ello, llamaron a la Sociedad de Ciencias Aranzadi y desde entonces, año tras año, gracias al auzolan de Aranzadi y los vecinos y las vecinas de Amaiur, lo que era leyenda volvió a surgir bajo tierra. El Castillo de Amaiur seguía ahí, bajo el monte, con sus piedras, sus bolas de cañón, sus espadas. La leyenda no era tal, la historia volvía a salir a la luz.

Conforme se acerca el año 2022, en Amaiur el esfuerzo por recordar el quinto centenario se ha multiplicado. Junto a la musealización del castillo, el año pasado se inauguró el Centro de Arqueología, que reúne la historia del castillo y los objetos encontrados en las excavaciones. Un museo provisional, pues, hace poco han adquirido una casa en mitad de la localidad, Agerrea, que han empezado ha acondicionarla para acoger en un futuro próximo el museo. Además, están preparando varios actos de cara al próximo año.