La escultura de Santa Bernardette ha vuelto a su lugar, a la gruta de Lourdetxo de Lekaroz. Hace varias semanas fue encontrada en el suelo, y a raíz de la caída sufrió bastantes daños, daños que ha reparado el escultor Cesáreo Soule, quien además de restaurarla ha instalado una nueva peana, en la que fue colocada ayer. La escultura, de 45 kilos, fue una donación de la marquesa de Jauregia de Irurita, hace unos 35 años.