Los pastores que en su época emigraron a América para trabajar como pastores comenzaron a reunirse en 1987 y lo hicieron ininterrumpidamente hasta el 2019. Tras dos años de parón obligado unos 15 de esos pastores "americanos" volvieron a reunirse el 1 de mayo.

Tras la misa se sacaron la foto "oficial" y volvieron a saborear un highball en el Bustitz, donde comieron. Siguiendo la costumbre, pudieron saborear dos deliciosos panes cocidos bajo tierra por Joxe Mari Arretxea Manterola.