estella-lizarra. Decenas de personas se reunieron para homenajear a la benefactora Jerónima Uriarte que destinó una herencia que recibió a edificar la residencia de San Jerónimo. De hecho, en diciembre se cumplirán cien años de la inauguración del asilo y en este homenaje, impulsado por el Área de Igualdad y la Asamblea de Mujeres, se ha querido poner en relieve el empoderamiento de las mujeres basándose en la labor de esta señora, tal y como indicaron alcaldesa de Estella, Begoña Ganuza, y la miembro de la Asamblea, Celes Gómez de Segura. "Este acto es un reconocimiento a Jerónima Uriarte y con él queremos empoderar colectivamente a todas las mujeres que individual o colectivamente representan los valores del cuidado, altruismo y generosidad".

Jerónima Uriarte nació en una familia humilde pero, como señalaron, "tuvo la suerte de heredar una considerable fortuna de unos parientes ricos". "Entre sus gestos de generosidad no olvidamos la donación de 28.000 pesetas a las escuelas de Estella en 1904 para instaurar unos premios escolares destinados al alumnado más aventajado. Este mismo año, dejó testado que cuando muriera su herencia iría a parar al Ayuntamiento con un fin expreso: una fundación destinada al cuidado y atención de las personas ancianas y desprotegidas", explicaron.

referencia En el homenaje se encontraban las hermanas María Carmen y Sara Etxeberria Alonso cuyos abuelos, Eustaquia Ugarte y Juan Etxeberría, fueron íntimos amigos de Jerónima Uriarte. De hecho, Juan Etxeberria fue el primer gestor de la residencia. Estas hermanas remarcaban algunas características de Jerónima Uriarte. "Era una mujer muy social que podía haber vivido muy bien, pero decidió dar su herencia a las escuelas y a los ancianos. Nos contaron que cuando recibió la herencia incluso habló con el Papa en Roma sobre qué hacer con ella. Viajó mucho, también fue a Tierra Santa y a Sevilla", señalaban. Estas hermanas poseen un manuscrito de Jerónima Uriarte en el que deja por escrito la jubilación de Eustaquia Ugarte. "Era muy adelantada. En este documento pone que a nuestra abuela se le daría la media peseta diaria que ella le daba, pues quería que continuase ganando igual soldada que ella le daba", añaden.

El director de la residencia, David Cabredo, señaló que el homenaje fue un reconocimiento "a todos los que han trabajado en el cuidado de los ancianos en San Jerónimo".