Tres mujeres comunicaron a la Policía Municipal de Estella haber sufrido pinchazos en la madrugada del viernes al sábado mientras disfrutaban de las fiestas de la localidad.

Tal y como establece el protocolo de actuación, los agentes trasladaron a dos de las mujeres al centro de salud y a la tercera al Hospital García Orcoyen.

El Jefe de Policía Municipal, Patxi Martínez, informó a DIARIO DE NOTICIAS de que los médicos estaban realizando análisis para detecar la posible presencia de sustancias químicas. En caso afirmativo, se corroborarían los supuestos pinchazos. 

La Junta de Seguridad de Estella, explicó el jefe de Policía Municipal, acordó antes de las fiestas que cuando se produjeran casos sospechosos de pinchazos las denuncias se interpusieran ante la Policía Foral o la Guardia Civil.

Según señaló Martínez, las tres mujeres aún no habrían denunciado en ninguna de las dos comandancias policiales. Hasta que no se registre, subrayó, no se puede llevar a cabo una investigación concreta sobre lo sucedido en la ciudad del Ega. 

Los supuestos pinchazos, según medios locales, se habrían producido en la plaza de San Martín, donde celebraba un concierto la discomóvil Feelback Events. Sin embargo, el jefe de Policía Municipal no confirmó que los supuestos pinchazos se produjeran en esa ubicación.

Según ha informado a DIARIO DE NOTICIAS la Policía Municipal de la localidad, los médicos están realizando análisis que confirmen dichos pinchazos. Estos casos se enmarcan en una oleada

El Ministerio del Interior ha informado esta semana de que investiga "que hay detrás" de estos sucesos, que están provocando un fuerte debate social por sus consecuencias sobre las libertades de las mujeres. "Los pinchazos han generado temor en la sociedad, lo que está sucediendo acarreado psicosis", explicó en este sentido Patxi Martínez, jefe de la Policía Municipal de Estella.

Diez comunidades autónomas investigan ya estos pinchazos, que también se dieron en los Sanfermines, y ya hay al menos 60 denuncias, aunque los casos sin denunciar pueden elevar esta cifra de misteriosas agresiones.

Las autoridades han recomendado que ante la sospecha de haber recibido uno de estos pinchazos se acuda al médico para garantizarse una atención adecuada y se denuncie en instancias policiales. La Junta de Seguridad de Estella acordó antes de las fiestas que cuando se produjeran casos sospechosos las denuncias se interpusieran ante la Policía Foral o la Guardia Civil, lo que aún no ha ocurrido en el caso de la ciudad del Ega. Hasta que no exista denuncia, no se puede llevar a cabo una investigación formal, según fuentes policiales.