Cada pueblo tiene su tradición. En Huarte, el lunes de fiestas los vecinos y vecinas sacan decenas de parrillas a la calle, preparan kilos y kilos de costillas a la brasa y se rechupetean los dedos. Ayer, la plaza El Ferial se volvió a llenar de mesas, jaimas y centenares de uhartearras que disfrutaron de este manjar acompañado con txistorra, panceta, tocino fresco, morcilla, pollo, ensalada, nachos, guacamole, embutido, patatas fritas, pastas, trenzas, sorbete, mojitos, zurracapote...

Una costilla a la sombra sabe más rica que al sol así que los vecinos más rápidos siempre colocan las mesas el domingo a la noche. “Después de que pasara el toro de fuego ya teníamos la mesa puesta. A la mañana hemos venido con las sillas”, señaló María Rodrigo. “A la noche dejamos los tablones en el suelo y ahora hemos colocado los caballetes, las mesas y las sillas. Hay que ser previsor porque te pilla un día de sol y calor y la lías”, incidió Maddi Resa. E incluso algún valiente trasnochó para que la familia comiera las costillas a la sombra. “Cada vez viene más gente así que he bajado a las tres y media de la madrugada. También preparo las costillas, así que la familia no se puede quejar”, bromeó José Nieto.

Los uhartearras también tuvieron que estar avispados para conseguir el carbón que el Ayuntamiento repartió en unos cubos. “Hemos salido escopeteados para no hacer cola. Había brasas para todos, pero queríamos hacer las costillas los primeros”, señaló Rufo. A la una del mediodía, las primeras parrillas empezaron a funcionar a todo trapo y la plaza El Ferial comenzó a oler que alimentaba. “Mucha costilla, mucha panceta, mucha chistorra, mucho vino y mucha cerveza”, bromeó Rufo, cuñado del presidente del Club Atlético Osasuna, Luis Sabalza, que ayer no se quiso perder la costillada. “Mi mujer y sus 10 hermanos son de Huarte. No podía faltar porque es el día grande y se forma un ambiente muy bonito”, afirmó Sabalza, que siempre acude a la cita si no coincide con las fiestas de Sangüesa, su pueblo natal.

También se vio entre las parrillas al mítico excapitán rojillo, Patxi Puñal. “Para un vecino de Huarte la costillada es el mejor día de las fiestas. Es muy bonito como todo el pueblo se une y sale a la calle. Te juntas con gente que no ves a lo largo del año”, aseguró Puñal. El exjugador de Osasuna es un forofo de la costillada desde txiki y nunca ha fallado a la cita a pesar de haber jugado 15 temporadas en el primer equipo. “Jugábamos el sábado o el domingo, el lunes entrenábamos a la mañana y el martes siempre teníamos fiesta. Así que caía genial”, relató Puñal.

FAMILIAS Y CUADRILLAS

La costillada es un día para disfrutar en cuadrilla o en familia. Maddi Resa, Maite Oroz, Nahia Aznar, Irati Urrestarazu, Leire Gorostiza, Itsaso Etxeberria, Eider Rubio, Izaskun Etxamendi, Elsa Ventura, Irune Ahetxu, Mikele Oloriz, Sara López, María Urdániz y María García disfrutan de la costillada en cuadrilla desde los 14 años. “Ya eres capaz de encargar por tu cuenta las costillas, sabes preparar un brasero y hacer las costillas. El primer año lo vives con mucha ilusión”, confesó Maddi Resa. Esta cuadrilla se junta cada año porque la costillada “es un día muy bonito que une a todos los cebolleros” -como se conoce a los vecinos de Huarte- y desde 2022 dejan venir a comer a Eneko Aguirre, Camino Hernández y Mikel Amorena; los “afiliados” de Villava. “Se lo pasaron tan bien el año pasado que han repetido. Les hemos dejado venir porque somos muy acogedores”, bromeó Maddi.

La familia Nieto García -Manuel, Ana, José, Miguel, Isabel, Adela, Cristina, Julia, Eneko y José Luis- celebran la costillada juntos desde hace más de 40 años: “Nos encanta el ambiente que se crea y el poder estar todos juntos en un día tan especial”, indicó Miguel Nieto, el abuelo más famoso de Huarte al que le han pintado un mural -la famosa imagen que le sacó su nieto Unai Beroiz en pandemia- en la fachada del polideportivo Ugarrandia. La familia se pegó toda la familia mirando de reojo a las nubes negras que al mediodía amenazaron con aguar la costillada. “Llevamos 40 años y aún no hemos comprado la jaima. Alguna vez ha llovido y hemos comido debajo de la mesa”, confesaron.

También es un fijo el mítico zurracapote de la sociedad de amigos Artadia: Iñigo Aristregi, Aritz Agorreta, Xabier Navaz, Alberto Ventura, Santiago Albéniz y Jorge Martiarena: “El zurracapote lleva listo desde el viernes. Lo importante es dejarlo fermentar”, explicaron. La cuadrilla, desde hace más de tres décadas, elaboran el zurracapote con la receta de Ángel Martiarena, padre de Jorge. “Mi padre tiene 82 años y ya lo preparaba cuando era adolescente”, subrayó Jorge.