pamplona - La Policía Municipal de Pamplona realizó el pasado año 453 actuaciones contra el consumo de drogas en Pamplona. En lo que va del año ya han realizado otras 98, destinadas a prevenir el consumo de droga en la vía pública. Parte de estas intervenciones se llevan a cabo en las proximidades de los centros educativos de la capital navarra, con el fin de prevenir el consumo de sustancias prohibidas, hachís y marihuana en la inmensa mayoría de los casos, por parte del alumnado. Una labor preventiva e informativa que tiene también su espacio en el aula.

Los agentes de la Brigada de Proximidad de Policía Municipal son los encargados de llevar a cabo las vigilancias en la mayor parte de los colegios e institutos, que ofertan tanto Secundaria como Bachillerato, y donde parte del alumnado, jóvenes entre los 16 y los 18 años, sale del centro durante el recreo.

La pasada semana, uno de los centros a los que se aceraron los agentes de la brigada fue el IES Navarro Villoslada, en el barrio de Ermitagaña. Como ocurre en estas ocasiones, hasta las inmediaciones del centro escolar se desplazaron dos patrullas de Policía Municipal; una de paisano, encargada de la inspección, y otra uniformada, destinada a labores de apoyo. La primera tarea es localizar dónde se pueden estar consumiendo estas drogas. “Suelen ponerse en grupo y lo primero es detectar por medio del olor o con la vista que se esté consumiendo algo”, cuentan los dos agentes que formaron la patrulla aquel día. “El objetivo principal es que vean que la Policía está aquí”, añaden.

En las inmediaciones de los centros educativos, afirman los agentes, es difícil detectar una venta o intercambio de drogas. Por ello, “tratamos de evitar el acto de consumo”, sostienen.

A los pocos minutos de comenzar a patrullar por las calles aledañas al centro los agentes hicieron la primera acta de aprehensión, nombre que recibe el documento que deben de rellenar los policías en estos casos, y que inicia el proceso de denuncia. En una de las calles próximas a La Vaguada, lugar que frecuentan los jóvenes del centro para pasar el recreo, un varón de unos 30 años estaba consumiendo marihuana. Una vez identificado, se le requisaron otras dosis que llevaba en ese momento y se hizo efectiva el acta de aprehensión. El varón se enfrenta a sanciones que van desde los 601 hasta los 30.000 euros, en distintos tramos y en función de la casuística. Todas las actas de aprehensión, explican desde la brigada, “son transmitidas a la Delegación del Gobierno en Navarra”.

uno o dos al día Aunque el tiempo que duran los recreos de los centros son relativamente breves, que coincidan en las horas centrales del día dificulta la organización de las vigilancias. “Normalmente nos suele dar tiempo a hacer uno o dos al día”, relatan los agentes. “Si un día pillamos a una persona en un centro es difícil encontrar a nadie los días siguientes, andan con más cuidado”, añaden.

Las actuaciones se reparten de igual forma por todos los colegios en institutos de la capital navarra, aunque los agentes reconocen que en algunos es más frecuente detectar consumo de drogas.

En la mayoría de los casos, los avisos sobre zonas donde habitualmente se realizan consumos suelen provenir del vecindario más próximo. “Hay muchos avisos al 092, la mayoría de vecinos”, explican. Con intervenciones como estas desde Policía Municipal se trata de evitar que el consumo de estas sustancias se normalice entre el alumnado. “Los que consumen son más mayores pero les ven hacerlos los de 12 o 13 años y normalizan el consumo”, dicen los agentes de la brigada.

consumo a la baja Aunque la presencia de drogas entre menores sigue estando bajo el foco de las autoridades, a nivel general, el consumo de cannabis está en descenso.

Según refleja el informe Edades, realizado por el Ministerio de Sanidad (que recoge datos del 2017), las personas que consumen estas sustancias en Navarra descendieron un 3,2%. Concretamente, un 8,2% de la población (personas entre los 15 y 64 años) declaró haber fumado un porro en el último mes en 2017, mientras que en la encuesta anterior, que recoge datos de 2015, el 11,4% de las personas encuestadas en la Comunidad Foral reconocieron haber consumido en los últimos 30 días. A nivel estatal, Navarra se sitúa como la décima comunidad autónoma con menos porcentaje de consumo. La media en el Estado se ubica casi un punto por debajo (8,21%), de los datos que afloran en Navarra.

Con respecto a otras drogas, como el alcohol y el tabaco, en Navarra desciende el consumo habitual de ambas sustancias. Sin embargo, la Comunidad Foral se sitúa a la cabeza en atracones de alcohol a nivel del Estado. Uno de cada cuatro navarros reconoció en la encuesta que se da un atracón de alcohol al mes (entre cuatro o más bebidas alcohólicas). Según el informe, el alcohol sigue siendo la droga más consumida en Navarra y en el Estado, aunque desciende el número de personas que lo consumen de forma habitual.