barcelona - El alcalde Joseba Asiron, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y el de Zaragoza, Pedro Santisteve, exigieron ayer durante el primer Congreso Transición Energética y Ciudad celebrado en la capital catalana que la energía sea “un derecho social y no una mercancía”.

Los tres alcaldes, que forman parte de los denominados “ayuntamientos del cambio”, subrayaron la necesidad de articular acuerdo políticos para revertir el modelo energético de las ciudades y garantizar que todas las familias tengan acceso a la energía limpia.

Durante su intervención, Asiron se refirió a la concienciación de la ciudadanía como la pieza clave para que cuajen este tipo de políticas energéticas dado que “son medidas que no tienen un reembolso inmediato”.

En su opinión, es crucial la interacción con los ciudadanos para que sea la sociedad, junto a los ayuntamientos, los que construyan alternativas al modelo energético actual.

“Ahora tenemos un modelo de producción que genera dependencia en nuestra economía y un oligopolio que gestiona ese recurso básico con un interés avaricioso generando pobreza energética”, comentó Colau durante el evento, que se realizó en el Campus de Barcelona y en el que también participaron los regidores de Madrid, Valencia y Cádiz.

Colau lamentó la “corrupción estructural” y las “puertas giratorias” de las grandes empresas energéticas, citando los “obstáculos” que tuvo durante los primeros años de su mandato porque “el oligopolio no aceptaba que llegara alguien a cambiarle las reglas del juego”. - D.N./Efe