En 1965 - Pamplona había desbordado ya los límites de su casco histórico medieval, y se proyectaba en diversas direcciones mediante amplias calles rectilíneas como Carlos III, San Ignacio o esta de Navas de Tolosa, que en el momento de la foto se estaba ensanchando para dar más fluidez al tráfico.
La imagen fue obtenida el 3 de septiembre de 1965. La prensa del día no se hace eco de la evolución de las obras, pero sí en cambio de otras interesantes noticias, como la marcha de la guerra de Vietnam, o la que enfrentaba a India y Pakistán, incluido el bombardeo y destrucción de la catedral de Ambala (India) por la aviación pakistaní. En lo más cercano, El Pensamiento Navarro relataba los pormenores de un “entrañable” encuentro de excombatientes requetés habido en el monte Isuskiza (Álava). Excursión con Vía Crucis, misa de campaña y luego comilona. Y a la tarde vuelta a casa, todos medio “piripis” y dormidos en el tren...
Hoy en día - La frondosidad del arbolado impide apreciar con detalle los edificios de la calle, aunque si pudiéramos verlos comprobaríamos que han sido sustituidos por edificios más altos y modernos, y que de la edilicia de entonces tan solo queda alguno suelto, aislado y un tanto descontextualizado.
A pie de calle podemos apreciar, por otro lado, que la ampliación de la calzada llevada a cabo en 1965, que buscaba la alineación con los árboles de la Taconera, se ha mantenido hasta hoy en día. En 2015-2019 una iniciativa urbanística innovadora, conocida como Proyecto de Amabilización del Primer Ensanche, transformó y actualizó los criterios de movilidad en boga desde mediados del siglo XX, para dar prioridad al peatón, a la bicicleta y al transporte público. Criterios que la derecha de siempre cuestiona y obstaculiza por todos los medios a su alcance, porque su apuesta sigue siendo el vehículo privado y a motor.
