PAMPLONA. La Gerencia de Urbanismo ha aprobado esta mañana la adjudicación del contrato de modelo de planificación fluvial del río Arga y sus afluentes río Elorz y río Sadar. El objetivo prioritario de todo el programa de actuación es la integración de los entornos fluviales en la estructura de la ciudad, manteniendo y potenciando sus valores naturales y urbanos, corrigiendo los impactos existentes y mejorando su funcionamiento hidráulico.

La adjudicación del contrato se propone a Tenada, Proyectos y Obras de Ingeniería del Suelo y Medio Ambiental S.L., por un importe de 45.375 euros, con una baja del 30% respecto al precio de licitación que fue de 65.500 euros. Este ‘Modelo de Planificación Fluvial del río Arga, río Elorz y río Sadar’ se concibe como la hoja de ruta de un proceso encargado de recoger la estrategia a seguir en función de la prioridad fluvial, social, ecológica y urbana. Se trata, por tanto, de establecer un eje vertebrador general, con visión de futuro, a corto, medio y largo plazo, con medidas de planificación con coherencia urbana y ecológica en sus tiempos y formas de ejecución.Además de esos objetivos generales, existen otros con los que trabajar también en el desarrollo de la propuesta. Entre ellos están proteger y favorecer la evolución natural de los entornos fluviales para que se desarrollen los ecosistemas característicos creando corredores naturales en un medio eminentemente urbano; mejorar y estudiar la relación del río con su entorno urbano; definir los tratamientos y usos más adecuados del cauce, riberas y zonas de influencia para permitir que estos espacios gestionen los caudales en las crecidas, con el objeto de minimizar los efectos de las inundaciones; y recuperar áreas de la ciudad situadas en el entorno de los ríos, degradadas en la actualidad en sus condiciones ambientales y de uso, ocupadas por actividades que generan impactos ambientales de importancia.

Asimismo, se busca conseguir la accesibilidad de al menos una de las riberas, posibilitando un recorrido longitudinal ininterrumpido para cada río, pasando de una a otra orilla; fijar mediante actuaciones enmarcadas en el ámbito de la bioingeniería el curso del río, que ha permitido una amplia variedad de usos y una gran calidad paisajística; y valorar la compatibilidad de usos, principalmente de aquellas actividades que no exijan infraestructuras.