pamplona - El Gobierno de Navarra ha paralizado el concurso para licitar las obras de construcción de las primeras viviendas proyectadas en la Ripa Sur de Erripagaña Pamplona. Apenas dos días después de que Nasuvinsa sacara a concurrencia pública las 44 VPO de la primera fase de Beloso Alto (la más próxima a las escaleras) el proyecto ha quedado en stand by a la espera de buscar una solución alternativa entre ambas administraciones tal y como ha propuesto el equipo de gobierno municipal de Pamplona. Fuentes del Gobierno de Navarra destacaron ayer que el alcalde de Pamplona Enrique Maya se ha puesto en contacto con el vicepresidente José María Aierdi para plantear una alternativa que posibilite liberar de edificación la Ripa de Beloso. La iniciativa, pendiente de definir, pasa porque se ofrezca al Ejecutivo foral otra parcela edificable en el término municipal para poder desarrollar las nuevas viviendas de alquiler joven a cambio de preservar la ladera de Beloso Alto como zona verde, tal y como demandan los vecinos. El departamento de Ordenación del Territorio, Vivienda, Paisaje y Proyectos Estratégicos pone como condición que la nueva parcela que el Consistorio municipal ceda a Nasuvinsa esté urbanizada y preparada por tanto para construir a la mayor brevedad ya que “urge la construcción de viviendas de alquiler joven ante la demanda existente”. Cabe recordar que ante las quejas vecinales el nuevo Ejecutivo propuso reducir a la mitad el número de viviendas proyectadas en la zona, es decir, levantar dos en lugar de los cuatro bloques previstos en la polémica ladera (191 VPO). La Asociación Pro Parque Ripa Sur de Beloso consideró la medida insuficiente. Con posterioridad el alcalde de Pamplona ha mantenido una reunión con los vecinos de la zona para transmitir su voluntad de estudiar alternativas a este emplazamiento. La plataforma, que han mantenido contactos con diferentes partidos, vienen manteniendo que existen suficientes motivos para no seguir construyendo en el ámbito de Pamplona de Erripagaña, el más densificado del nuevo sector residencial. Destacan así que el PSIS data de 2002 y que es momento de revisar algunas actuaciones esta promoción dados los costes medioambientales, económicos (talud con “riesgos” por la pendiente del terreno lo que implica mayor coste en la ejecución) y urbanísticos ante las desigualdades entre los tres municipios del ámbito en materia de espacios libres, reiteran. Destacan que en Erripagaña Pamplona residen más de 4.000 vecinos que carecen de espacios verdes y que la ladera que defienden se haya próxima al parque fluvial. En Ripagaina Pamplona suman 1.640 viviendas (940 protegida) lo que supone un ratio de 100 viviendas por hectárea. De las 4.200 viviendas previstas en el proyecto original se va a pasar a más de 6.000, resaltan, incluyendo las más de 600 que está previsto construir en término de Burlada junto a una zona comercial.