PAMPLONA. - Los usuarios del Centro Recreativo Guelbenzu en la Milagrosa, propiedad del Instituto Navarro del Deporte del Gobierno de Navarra, han solicitado que se arreglen los desperfectos provocados por el temporal ocurrido a mediados de diciembre, que entre otros daños en la ciudad provocó la rotura de la cubierta retráctil de la piscina.Desde entonces, el centro permanece cerrado y sin fecha concreta para que vuelva a reabrirse. Por este motivo, un grupo de usuarios y de empleados del centro se concentraron la semana ante las oficinas del Instituto Navarro de Deporte para solicitar que se acometan las obras y que mientras tanto puedan ser utilizadas el resto de las instalaciones, dado el servicio que prestan y el número de abonados con los que cuenta el centro, cerca de los 2.000.

Uno de los usuarios, José Antonio Dávila, de 63 años, comentó ayer la importancia que Guelbenzu-Educación y Descanso tiene entre el vecindario, especialmente para las personas mayores de la Milagrosa, muy numerosas en este barrio. "La mayoría de los abonados son residente del barrio, gente humilde que utilizan estas instalaciones para rehabilitaciones y practicar deporte, ademas de la labor social que se desarrolla como lugar de encuentro para muchos vecinos de la Milagrosa".

UN LUGAR PARA DUCHARSE Algunos usuarios, según explicó Nerea Cristóbal, empleada del centro, acudían "todos los días para ducharse, porque la mayoría de las viviendas del barrio son antiguas y tienen bañeras, no duchas. Les resultaba más cómodo venir aquí, que pueden hacer algo de actividad y ducharse cómodamente".

Además de los usuarios del barrio y de otras zonas cercanas, las instalaciones del centro Guelbenzu son utilizadas habitualmente por deportistas de la federación navarra de natación, en las diferentes modalidades como waterpolo o sincronizada, y por centros escolares. También se había convertido en la piscina de referencia para personas con discapacidad, como los usuarios de Anfas o de Anasaps, y para deportistas en proceso de rehabilitación procedentes del centro de alto rendimiento.

Para Koldo Morrás, las instalaciones de Educación y Descanso son una parte fundamental del barrio. "El deporte y la actividad son esenciales para la gente mayor o la gente joven. No sería muy entendible prescindir de unas instalaciones así si queremos mantener esas políticas de salud. La Milagrosa es un barrio muy abandonado y esperemos que el centro se mantenga en las mismas condiciones en las que estaba antes del temporal".

Begoña de Carlos, otra empleada y delegada sindical de CCOO, comentó que tras la reunión mantenida en el Instituto Navarro de Deporte con el subdirector de desarrollo estratégico infraestructuras y gestión de recursos, Ramón Santesteban y el técnico Alfonso Gogorcena, "nos dijeron que las obras iban a empezar esta semana, pero la cosa sigue paralizada. Además, había que realizar unos trabajos para acondicionar el centro a la normativa vigente, que esperamos que se hagan".

Los daños causados por el vendaval desatado durante la noche del 18 al 19 de diciembre afectaron a la cubierta de la piscina climatizada, que quedó desplazada por efecto del viento, pero no al resto de las instalaciones. El centro cuenta también con dos frontones, gimnasio, parque infantil, pista de baloncesto y merendero.

La plantilla ha solicitado retirar "cuanto antes" la cubierta para eliminar riesgos y que se precinten los accesos a la piscina hasta que se acometa la licitación.

Dávila considera que esta situación es "un incordio para todo el mundo" y que debe solucionarse con la mayor brevedad posible. "Nos plantearon como alternativa hacer uso del Aquabide, pero resulta imposible para personas mayores con dificultades de movilidad. No se puede nadar en el Aquabide, es como una bañera, y estos días está saturada de gente".