PAMPLONA. Delegados del sindicato LAB y madres afectadas por la gestión de las escuelas infantiles en euskera han registrado este miércoles las 7.450 firmas recogidas, que incluyen a familias y trabajadores, para paralizar el proceso de reducción del número de centros que ofertan el modelo D en Pamplona.

Una de las madres afectadas, Aitziber Biurrun, ha asegurado que "escudándose en una sentencia judicial", el Ayuntamiento de Pamplona, junto a los padres que se querellaron en su momento, a través de un "acuerdo privado" y validado por el juez "han decidido el futuro de una ciudad" para los próximos cuatro años.

Biurrun ha añadido que las familias no sabían nada de este acuerdo hasta esta semana, que han recibido una carta informándoles de ello y ha calificado la situación de "escándalo", por lo que el próximo jueves han organizado una concentración "ruidosa" en la Plaza Consistorial durante la celebración del pleno en el Ayuntamiento "para que nos oigan".

Además, ha anunciado que han hecho una moción y participarán dentro del pleno invitados por EH Bildu y a través de la lectura de un comunicado y ha aseverado que "tiene que haber presión en la calle" y que lo mínimo que necesitan sus hijos "para seguir viviendo en euskera" es no quiten las cuatro escuelas infantiles del modelo D.

"No somos optimistas, pero tampoco pesimistas", ha admitido Biurrun, que ha expresado la necesidad de que "en todos los barrios hubiera la posibilidad de modelo D", porque "durante treinta y tres años" las familias que querían que sus hijos estudiasen en euskera han tenido que desplazarse "hasta la otra punta de la ciudad".

La delegada de LAB en la Comisión de Escuelas Infantiles, Uxue Alonso, ha explicado que la recogida de firmas presenta una "lectura pedagógica" de la importancia del euskera "como patrimonio cultural de los navarros" y ha hecho hincapié en la incertidumbre que supone para los trabajadores esta situación.