La concentración de personas en algunas calles de Pamplona durante las noches del fin de semana ha obligado a proceder a su cierre temporal, según informa la Policía Municipal que ha realizado 130 denuncias por incumplimiento de las normas establecidas por motivo de la COVID19.

Estas denuncias tienen que ver, entre otros motivos, con la participación en botellones, no usar la mascarilla, fumar sin respetar la distancia o estar en grupos de más de seis personas.

El buen tiempo ha propiciado que en algunas zonas de la ciudad se hayan producido concentraciones de personas que no cumplían las normas, señala la Policía Municipal, que califica como "muy intensa" la actividad de las patrullas.

Para la noche del sábado al domingo se había establecido un dispositivo de Policía Municipal reforzado con patrullas de Policía Foral teniendo como objetivo prioritario el control de las zonas más masificadas y también otras en las que se incumplía manifiestamente la normativa sanitaria.

En las 20:00 horas del sábado y las 6 horas del domingo las patrullas realizaron 83 intervenciones de todo tipo, entre las que figuran 42 personas denunciadas por hacer botellón en la calle o el desalojo de la calle Comedias por no respetarse la distancia mínima de personas.

Además un local de hostelería fue denunciado por incumplimiento y posteriormente su responsable solicitó presencia policial para desalojar a unas 60 personas que se negaban a salir.

Entre los motivos de las actuaciones figuran también fiestas en domicilios o la venta de alcohol después de las 22:00 horas.