s el resultado de un derribo, el que se produjo en septiembre cuando el Ayuntamiento de Pamplona procedió a la demolición del bloque 12-14 de las Casas de Oscozbloque 12-14 de las Casas de Oscoz, dos portales de un edificio degradado de 1917 ubicado en medio de la Rochapea, entre Joaquín Beúnza y Marcelo Celayeta. La actuación, que vino a sanear una zona demasiado angosta y mal planificada de origen -el inmueble estaba encajado en el resto-, ha dado como resultado un espacio abierto de casi 600 metros cuadrados, cuyo destino, según anunció en su día el área de Urbanismo municipal será una plaza urbanizada a base de solera de hormigón y baldosa hidráulica gris, con cinco bancos de losa. Apenas vegetación.

Diseño anunciado por el Ayuntamiento, con solera gris. Foto: D.N.

Con esta idea, los vecinos de la Rochapea que hacen la revista Ezkaba se pusieron manos a la obra para imaginar un espacio acorde a las necesidades del barrio. Porque, según opinan, “la Rochapea es un barrio limitado por el río, la vía del tren y las faldas del monte Ezkaba”, muy “condicionado urbanísticamente”, y el resultado es “muy caótico”, consideran.

Por eso, según explica Roberto Carmona, uno de los integrantes de Ezkaba, se les ocurrió aprovechar la idea de una plaza en el solar de Oscoz para pensar cómo querían que fuera. “Enseguida nos salió compararla con parques cercanos”, como el luminoso parque de Enamorados o el verde parque fluvial, “y pensamos que no debería ser un espacio más en el barrio, sino que fuese LA PLAZA con mayúsculas”. Un lugar que “por su singularidad” consiguiese a la vez atraer a la gente del barrio y de otras zonas, lo que podría ser “positivo para los establecimientos de la Rochapea”, opinan.

En el mes de noviembre, a través de la revista Ezkaba, pusieron en marcha el proceso participativo para recabar ideas para este rincón, así como un nombre.

A la vez han contactado con los colegios Patxi Larrainzar y el CP Rochapea, así como la Federación Batean, que trabaja con la infancia y juventud del barrio, “con la finalidad de hacer sentir a los txikis parte de su creación y empoderarlos como ciudadanos y ciudadanas”. De esta forma conseguían también llegar a la población extranjera, reforzando su arraigo con la ciudad “y creando un vínculo con la plaza”, añade.

Imagina tu plaza, en 7 idiomas A través de la página de Facebook, la campaña incluyó carteles con el lema Imagina tu plaza en 7 idiomas (castellano, euskera, francés, inglés, rumano, búlgaro y árabe) y califican la respuesta del vecindario de “éxito”. Las premisas para soñar un espacio vecinal eran que se primara el “bienestar de las vecinas y vecinos de los edificios colindantes”, y su tranquilidad tanto de día, “colocando elementos para evitar juegos de pelotas y balones golpeando paredes”, como de noche, “evitando rincones y espacios oscuros”. Asimismo, que se dé “espacio a la vegetación para naturalizar el lugar”, el acceso “cómodo” a viviendas y bajeras; el “disfrute de los usuarios”, pensando básicamente en la Tercera Edad e Infancia, con “asientos protegidos del viento norte en zonas soleadas”, y “para la infancia setos entre los que jugar con altura menor de metro y medio para sus juegos, y asientos para sus padres y madres”. Se proponía también un espacio para realizar puntualmente “labores de plantación” y “libre de pintadas”.

Entre las ideas recibidas, los miembros de la revista Ezkaba destacan el trabajo realizado por los docentes y alumnos del CP Patxi Larrainzar, que “acudieron al lugar para verlo in situ”. Entre sus aportaciones, proponían “arreglar las viviendas colindantes” y “tener una cafetería en la plaza”. Este trabajo, según valoró el centro escolar, “ha sido importante para que los txikis valoren los espacios públicos como propios y cuiden de ellos”, indican.

Roberto Carmona, de Ezkaba, explica que la propuesta ha sido remitida ya a la concejala de barrio, Carmen Alba, así como al área de Urbanismo municipal, y en los próximos días la presentarán en el Registro. Aunque son conscientes de que al final estas intervenciones “dependen de los técnicos”, señala que “el trabajo más importante ya está hecho” y ese ha sido “empoderar a la gente del barrio” y que se sientan “parte de su ciudad”. Ahora sería interesante que los políticos estudiaran sus ideas.

Estado actual del solar, tras el derribo realizado en septiembre y donde se prevé una gran plaza de unos 600 m2.

63 viviendas. El Proyecto de Intervención Global del Ayuntamiento para completar el desarrollo de esta zona va a suponer la renovación energética de los portales del Grupo Oscoz 4, 5, 6, 7 y 8, y de Marcelo Celayeta 20, 22 y 24, construidos a partir de 1961. Los 8 portales se agrupan en tres edificios con un total de 63 viviendas. Las plantas bajas se dedican a uso comercial, que podrá revializarse con la urbanización de la nueva plaza. La rehabilitación mejorará la envolvente térmica, redes, calefacción, etc. y les dotará de ascensor.

Artistas locales. Una comerciante propuso decorar la plaza con creaciones de artistas locales. También colocar una pequeña estantería como Bookcrossing (estantería para dejar libros), bancos con frases literarias...

Jardín vertical. Ezkaba, con el experto Oscar Pérez Andueza, ha desarrollado su propuesta, con jardines verticales con “plantas autóctonas”. Dado que “solo hay dos jardines” así en Pamplona “conseguiríamos un atractivo para el barrio”. Unos totem con trepadoras y un laberinto de setos completaría el conjunto.

Los nombres. Algunos: plaza de La Luz, de Los Pueblos, de los Colectivos Juveniles, de La Imaginación, de La Poesía, de los Artistas o de la Red de Mujeres.