La mayoría que conforman los grupos municipales de EH Bildu, PSN y Geroa Bai considera necesario paralizar el proyecto de reforma urbanística de la Milagrosa, conocido como PEAU, hasta que no haya un proceso participativo en el barrio que sirva para despejar todas las dudas que se han generado.

El acuerdo se ha materializado en un comunicado conjunto emitido este martes, como paso previo a una declaración consensuada que las tres formaciones han presentado para su debate en la Comisión de Urbanismo de mañana.

La iniciativa plantea que el proceso participativo esté dirigido especialmente a los vecinos afectados por el proyecto y que el Ayuntamiento asuma "que el desarrollo de las ZIP requiera del acuerdo vecinal e implique el derecho a intercambiar la vivienda que se derribe por una VPO".

El PEAU contempla actuaciones en distintos ámbitos para reurbanizar uno de los barrios más abandonados de la ciudad. Además de reordenar la trama urbana del barrio y la creación de plazas y dotaciones, contempla el derribo de algunos bloques.

En estos casos se aplicaría la herramienta conocida como ZIP (Zonas de Intervención Preferente, ya utilizada en el Casco Viejo) para realojar a los afectados -unas 96 familias de 10 portales- en viviendas nuevas de VPO.

EH Bildu, PSN y Geroa Bai solicitan "el compromiso del Ayuntamiento para que las personas propietarias residentes en las zonas afectadas por las ZIP tengan derecho a una vivienda nueva gratis, en régimen de VPO (lo más cercana al barrio) en sustitución de su actual vivienda; y a su vez se garantice el realojo de las personas residentes en régimen de alquiler".

Además, los grupos de la oposición piden el "compromiso para la elaboración de plan específico sobre los locales comerciales y talleres afectados y sus alternativas de futuro".

La mayoría municipal considera que "el PEAU de la Milagrosa-Arrosadía nació con el objetivo claro de solucionar las insuficiencias urbanísticas, déficits dotacionales y ambientales que concurren en el barrio y resolver las patologías de muchos de los edificios, que, construidos en torno a los años 60 y 70 del siglo pasado, responden a patrones constructivos y acabados materiales propios de barrios de las periferias industriales, y que reclaman una rehabilitación en términos de mejora de las condiciones de accesibilidad y eficiencia energética".

Los grupos municipales destacan que "en agosto de este mismo año el equipo de Gobierno aprobó inicialmente este PEAU. En estos últimos meses se ha extendido la preocupación entre el vecindario que tiene su vivienda en alguno de los ámbitos ZIP de este documento por el temor a sufrir derribos sin su consentimiento y pérdidas patrimoniales por falta de compensación suficiente, cuestión que no se ajusta a la realidad del PEAU".

Los grupos políticos concluyen que "a petición de una asociación vecinal que quería trasladar esa preocupación, tuvimos una reunión conjunta donde pudimos escuchar de forma directa cuáles eran las razones de su preocupación y oposición a la continuidad del PEAU".

A partir de aquí, consideran que es posible darle continuidad "siempre y cuando el Ayuntamiento adquiera unos compromisos claros y muy concretos, y se informe a la ciudadanía".

La tramitación del PEAU lleva varios años dando vueltas, hasta que antes del verano los grupos acordaron por unanimidad ponerlo en marcha aprovechando los fondos europeos que van a estar disponibles para actuaciones de este tipo.

El consenso se basaba en 3 puntos: que no habría realojos sin acuerdo previo con los vecinos; que se trasladará a la Milagrosa una oficina para impulsar la iniciativa y mantener el proyecto del civivox.

El PEAU se centra en Milagrosa y Santa María la Real y afecta, además, a Arrosadía y Lezkairu, como zonas de la Unidad Integrada XVI.

El documento recoge, como principales intervenciones, la reforma de la plaza de Río Ega, la creación de tres nuevas plazas en Manuel de Falla, en el parque Tomás Caballero y en el entorno de la avenida de Zaragoza, y propuestas tanto para mantener el edificio del colegio Víctor Pradera -Paderborn como para la construcción en ese espacio de una dotación pública de nueva arquitectura.