Algo más de medio centenar de vecinos de Mendillorri se ha concentrado esta tarde en el lugar en el que los últimos dos días se han talado más de 100 chopos para la conexión de la ronda con Mugartea. “Hace muchos años que estaba proyectado el desdoble, pero no nos imaginábamos que se iban a meter hasta aquí. Tenemos un duelo, es la zona de Mendillorri por donde más paseamos. Nos han quitado un pedacico de nuestro recuerdo”, ha dicho Isabel Pérez, vecina del último portal de Monte Campamento desde hace 27 años.
Las ventanas de casa de Cristina Lasheras dan justo a la carretera. “Llevo aquí 29 años, cuando llegué no habían hecho ni las aceras, y he visto crecer estos árboles. Es una vergüenza lo que han hecho, no había necesidad”, ha lamentado. “Llevamos años pidiendo una barrera de sonido, y no ha habido manera, y esto lo talan de la noche a la mañana. Cuando las cosas se hacen a escondidas es porque saben que no es legal”.
“Ya sé que nos van a decir que el chopo no tiene gran valor ecológico, pero lo más fácil es talar”, comentaba Simón Gómez Barrena. Respecto a la repoblación, ha explicado que “nos puede parecer bien, pero los metros de verde que quitan a todos los pamploneses, no solo a Mendillorri, son una pena. Y a ver qué les parece a los vecinos de enfrente que se acerque 10 metros la carretera”.
A Tomás Izco, que vive en un 3º frente a la PA-30, le parece fatal: “Nos van a plantar la carretera en el mismo portal. Y los árboles que siembren... si los que había han tardado 25 años en crecer, vamos a tener que esperar otros 25. Mientras tanto, a jodernos de calor”. Sentía “pena porque todo el entorno se lo han cargado e indignación por cómo han actuado, sin avisar, enseñar el proyecto, sin consultar a los vecinos... nada”.
“Era lo más bonito de Mendillorri, daba sombra y se paseaba muy a gusto. Tenían que preguntarnos primero, es nuestro barrio. No nos han tenido en cuenta”, abundaba Mari Luz Ribera. “Cambio climático, reciclaje... y resulta que nos cortan ciento y pico chopos, que además hacen pantalla antirruido y contra el calor”, ha dicho su amiga Carmen Falcón.
Para Jesús Jimeno supone “una aberración total” la tala “para hacer la entrada a una urbanización. Y no he estado enterado en ningún momento. Por aquí venía mucha gente, con perros, a pasear... formaba parte de la fisonomía del barrio. De sopetón lo han cortado y ya está. Yo vivo enfrente, me asomo a la ventana y veo que están cortando los chopos”.
Gloria Bosque se enteró de la tala el mismo jueves, y “me pareció totalmente indignante. La cumbre de Glasgow, lo del Medio Ambiente... y aquí se están cargando árboles a favor del coche. Era un paseo súper agradable y está totalmente desolado. Lo único que tengo es una mala hostia total”.
“Me gustaría que hubieran expuesto al barrio lo que querían hacer y las razones. No sé si los chopos estaban enfermos o no, si eran peligrosos... me hubiera tranquilizado si nos lo cuentan. Pero te levantas una mañana, vienes aquí y no hay nada”, se ha quejado la joven Naroa Capel. “Lo que tenían que hacer es avisar a los vecinos y haber repoblado ya esto de árboles. Bien de árboles. Pero a la sociedad no le informan nunca”, ha considerado Iosu San Martín.
Y Pilar Martín ha argumentado que lo único que les quedaba era “mostrar nuestro enfado. ¿Qué piensan? ¿Colocar la autopista a los pies de las ventanas de los vecinos? ¿Eso es calidad de vida? ¿Eso es Medio Ambiente? ¿Qué sostenibilidad? ¿Pero a qué van a las conferencias? No cuesta nada hablar desde las administraciones. No se entiende por qué unos chopos no se pueden respetar y se le tiene que volver a dar prioridad al coche y a la velocidad. Esto está desolado, es como si hubieran venido los bárbaros a esta tierra. Ni Atila deja esto así”, ha concluido.
Futura siembra
El proyecto contempla la siembra de 88 chopos de gran porte y 28 medianos, cuatro ciruelos de hojas púrpuras, cinco encinas, nueve plátanos de sombra, cuatro árboles del paraíso y dos cinamomos. Y la Dirección General de Obras Públicas del Gobierno de Navarra está estudiando, junto con el Servicio de Zonas Verdes del Ayuntamiento, la modificación del proyecto inicial “para su mejora”.
