- El curso académico va llegando a su fin en el IES Ribera del Arga y en la finca agraria de Peralta han tenido que darle una vuelta por completo a la situación dado que allí la parte práctica es algo esencial. Con muchos proyectos paralizados y otros tantos en el aire a la espera de que la situación mejore, Josean Pérez-Sevilla, jefe del departamento de Agraria del centro ribero, asegura que han logrado reinventarse e implicar a los alumnos en el camino.

Aunque los primeros 15 días tras declararse el estado de alarma fueron los más críticos, ahora la situación está más controlada. Y es que, recordaba Josean, los alumnos dejaron de ir a clase de un día para otro y allí se quedaron las plantaciones y los animales. Por este motivo, una persona se encargó, dentro de sus de sus posibilidades, de todo el mantenimiento de la finca. Sin embargo, y "viendo que estábamos bajo mínimos, el departamento de Educación adelantó los plazos y nos envió a dos personas (ayer entró la tercera) para que ayudaran en las labores de cuidado como otros años. Estarán todo el verano".

Y es que el objetivo es que en septiembre cuando se vuelva a las aulas "estén las plantaciones habituales, los alumnos mantengan sus rutinas y la parte práctica pueda realizarse".

Con la mayoría de clases a pie de campo, "nos hemos tenido que amoldar; la teoría se ha suplido a base de videollamadas y tratando de paliar la brecha digital, mientras que en la parte práctica, hemos tirado hacia adelante como se ha podido". En este caso, explicaba este docente, les han pedido supuestos prácticos.

Los alumnos, además, tenían que haber estado estos meses formándose en las diferentes empresas de la zona, algo que ha quedado aplazado. La idea, explicaba Pérez-Sevilla, es que los estudiantes que tienen previsto seguir estudiando hagan un proyecto final mientras que aquellos que quieren dar el salto al mercado laboral realicen sus prácticas a partir de septiembre con el objetivo de que les sirvan de trampolín. Y es que, insistía, "el 80% del alumnado encuentra trabajo después de hacer las prácticas".

Pendiente de acabar ha quedado la zona de compostaje que están habilitando con el objetivo de potenciar una economía circular y de lograr cerrar todo el ciclo de la materia, así como la entrega de los huertos sociales, que estaban a falta de los últimos detalles.

En este caso, y gracias a la ayuda del Ayuntamiento que se encargará estos meses del mantenimiento, desvelaba Josean, no darán un paso atrás y cuando vuelva la actividad se encontrarán el terreno tal y como lo dejaron.

También se ha paralizado el proyecto Erasmus+ Bioalternativ; la localidad iba a ser en mayo de nuevo anfitriona de una de estas citas con alumnos de diversos países, y por último, en el aire también están las prácticas que, por primera vez, dos alumnos iban a realizar en el extranjero, concretamente en Francia.

El IES Ribera del Arga, que tiene abierto el plazo de preinscripción hasta este viernes vía telemática, cuenta con dos ciclos de dos años de duración cada uno; FP básica de Agrojardinería y composición floral y el Ciclo Medio de Producción Agroecológica. Ahora hay unos 12 alumnos de media en cada uno y, aunque son estudios eminentemente prácticos, "el componente teórico es muy importante".

El ciclo medio solo se imparte en castellano en Peralta (en Pamplona está en euskera) y, aunque el 80% del alumnado es de la zona de la Ribera, son muchos los que se desplazan de otras zonas de la Comunidad foral y La Rioja. "El mayor inconveniente es la comunicación puesto que no hay autobús y los estudiantes, la mayoría sin carné de conducir, dependen de que les traigan y les lleven", apuntaba.

Aunque alguna vez han luchado por implantar algún otro módulo, "lo prioritario sería poder impartir el ciclo superior de Producción Agroecológica, pero no existe, no está desarrollado. Sería un salto importante", finalizaba Pérez-Sevilla, al tiempo que agradecía el apoyo de la dirección del centro, el Ayuntamiento, y el departamento de Educación del Gobierno foral.