La diversión, la jarana, los chupinazos y los pasacalles volverán, pero el año que viene. Peralta y Falces acaban de anunciar que suspenden las fiestas patronales del 2020 siguiendo las recomendaciones y velando por la seguridad y la salud de los vecinos y visitantes. Con pena, pero sabedores de que es un mal menor, los Ayuntamientos han tomado esta determinación por prudencia y coherencia.

En el caso de Peralta, explicaba el alcalde Juan Carlos Castillo, “no ha sido una decisión fácil, que quede claro, pero está tomada teniendo en cuenta los riesgos sanitarios. La semana de fiestas es muy agradecida porque después de todo el intenso año son días de evasión que vienen muy bien y no poder disfrutarla después de haberlo pasado tan mal estos meses, duele. Sin embargo, tiene que primar la salud y, además, se ha recomendado desde el Gobierno y la FNMC”.

Se trata de un tema, recalcaba el primer edil, que lleva tiempo sobre la mesa, y que han acordado por unanimidad. De hecho, también han cancelado las fiestas de la Juventud, previstas el próximo fin de semana de junio.

La idea que tienen en Peralta, cuyas fiestas se alargaban nueve días en septiembre, es hablar con bares y sectores afectados para ver qué se puede hacer para revertir la situación. De hecho, están pensando aumentar la programación de espectáculos y actuaciones de verano que hasta ahora se aglutinaban en agosto y hacerlos en julio y agosto y en diferentes espacios (tanto sesiones infantiles como actuaciones para adultos.).

En cuanto a la partida económica que el Ayuntamiento habilitó para estos días, apuntaba Castillo, no será desaprovechada puesto que, además de invertirla en los gastos sanitarios a los que han tenido que hacer frente y al déficit derivado de la suspensión de contratos, existe un plan de reactivación social y económico que requerirá de importantes incentivos una vez que lo implementen.

falces, para el 2021 El pleno de Falces, tras la reunión que mantuvieron recientemente con asociaciones, peñas, hosteleros, ganaderos y cuadrillas, acordó este miércoles por unanimidad la cancelación de sus fiestas, previstas para mediados de agosto.

La alcaldesa, Sara Fernández, explicaba que, tras conocer la recomendación de Gobierno y FNMC, “tenemos que sumar todos en el mismo camino y ahora mismo lo más importante es proteger la salud de los vecinos. Es una decisión histórica y complicada pero, por mucho que sean unos días de evasión y paréntesis, nada supera la responsabilidad social y política con la que debemos responder ante una situación excepcional”.

Los falcesinos y visitantes echarán de menos las verbenas, las charangas o las degustaciones populares pero, sobre todo, la emoción de los minutos previos al encierro del Pilón y la propia carrera, un festejo que atrae a miles de personas y que ahora mismo es inviable celebrar.

El Ayuntamiento, que no realizará ni convocará ningún acto relacionado con las fiestas, ha hecho un llamamiento especial a los jóvenes para “cuidar y velar por nuestros mayores, el sector más vulnerable”.

Fernández, eso sí, aseguraba que la idea es reforzar la programación cultural de verano con espectáculos tanto los viernes como los sábados con el objetivo de reflotar la actividad del municipio, aunque siempre cumpliendo con las recomendaciones que dicten desde los círculos sanitarios

En este caso la idea es desplazar los espectáculos por diferentes puntos del casco urbano y que no se celebren solo en la plaza de los Fueros.

El alcalde afirma que ahora tiene que primar la salud.

La alcaldesa apela a la responsabilidad y a la coherencia.