sangüesa/zangoza - Sangüesa se vistió ayer de fiesta en una especial mañana de domingo para el día grande de sus fiestas de invierno en honor a San Sebastián, patrón de la ciudad.

La lluvia dio tregua y la fiesta fue completa, si bien hizo acto de presencia a primeras horas de la mañana por lo que la Banda Municipal y los gaiteros, que unen sus instrumentos en este día, tuvieron que acelerar sus dianas. Sin embargo, a la hora señalada para la procesión y la posterior misa, no asomó y permitió a la Comparsa lucirse como cada 20 de enero por las calles y en la plaza de Santiago, en donde cada año bailan al santo al son de banda y gaitas locales.

Las campanas daban sus últimos toques en Santiago cuando Ayuntamiento, Comparsa y Banda Municipal salieron hacia la iglesia para partir desde allí en procesión por las principales calles de la ciudad.

El paso lo marcaba por vez primera en este día la batuta de Javier Calvo, codirector de la Banda junto a Imanol Blasco, que ayer formó parte de los gaiteros, junto a Patxi Gómez y Ana Iso.

Precisamente ayer hacía un año que juntos tomaron el relevo al anterior director, Jokin Borromeo y desde entonces, se reparten la tarea. En el aniversario de su estreno al frente de la joven formación musical en el día de San Sebastián reconocía Calvo que la banda había sonado con fuerza. “Al ser domingo estamos casi todos, unos 48, y ha sonado muy bien”.

En la plaza esperaban impacientes vecinos y vecinas sus notas conjuntas y al son de ellas, bailaron los gigantes una vez más la Jota Vieja al santo. “Es el momento de mayores nervios, por su emotividad y porque todo el mundo está pendiente. Impone la responsabilidad del momento y sientes que no se puede fallar”, expresaba al final el joven director, Javier Calvo, al tiempo que reconocía aliviado y satisfecho que todo había salido perfecto, música y baile.

Un año más, junto a ellos no podía faltar el sonido del txistu de Luis Mari Vital, Txus Malón y Carmen Beorlegui, tras los dantzaris de Rocamador, fieles a su compromiso con el día señalado en el calendario sangüesino.

Balcones adornados, de vuelta a la iglesia, a la altura del número 15 de la calle de Santiago, se oyó la jota de Marta Sola acompañada al acordeón Miguel Ochoa, que también por vez primera se cantó en el día de San Sebastián, antes de la misa amenizada por los auroros dirigidos por Bruno Jiménez.

centenario Iñaki Borromeo e Ignacio Villanueva, junto a Ander Rebolé y Jorge Miranda, protagonizaron “con ilusión” el baile de la primera Jota Vieja en la plaza de Santiago. Les sustituyeron posteriormente en la segunda, interpretada a las puertas del ayuntamiento, Nacho Lacosta, Pedro Roldán, Fermín San Martín y Alfredo Miranda.

Dos equipos para dos piezas de una Comparsa para la que este 2019 será una año especial ya que se conmemora el centenario de la pareja de reyes cristianos. “Estamos dando forma a los actos de celebración y en el calendario ya tenemos dos fechas elegidas: el 31 de agosto con una concentración de gigantes y el 7 de septiembre, día en el que bailaremos todas las piezas en las Arcadas con los colectivos musicales locales”, explicaba Fermín San Martín, su presidente.

Al frente del colectivo desde hace tres años, San Martín es el más veterano del grupo con tres décadas de participación, junto a los 28 de los hermanos Miranda y los 25 de Nacho Lacosta. “Es un año importante para la comparsa que goza de buena salud con el futuro asegurado y estamos muy agradecidos del seguimiento de la gente”, afirmaba el presidente.

Imprescindibles en las mañanas festivas, ayer llenaban la calle con sus grandes figuras, mientras los cabezudos hacían de las suyas y entretenían a los más pequeños. Entre ellos, entregados a la tarea, los protagonistas del inicio festivo, Calvo y Pocaboina, anunciadores de unas fiestas que ayer terminaron con teatro familiar en el Auditorio del Carmen, bailables en las Arcadas con luces y carreras de toros de fuego.