El colegio público San Miguel IESO de Aoiz no solo se ha quedado pequeño, si no que además, no cumple la normativa vigente en materia educativa. Sus infraestructuras insuficientes no se adaptan al volumen de matriculación actual ni se adecuan a la evolución social de la villa.

Su situación la dieron a conocer ayer a la comisión de Educación del Gobierno, su directora, Inma Beroiz, con los jefes de estudio, Eneko Gil (primaria) y Xabier Guibelalde (ESO). Además, participaron en el encuentro el alcalde de Aoiz, Unai Lako, y la edil de Asuntos Sociales, Maite Fernández.

El centro cuenta con 493 matriculas (77 de otras localidades), alumnado atendido por 60 profesionales (38 primaria y 22 ESO). Imparte Infantil, Primaria y Secundaria y los modelos A, G y D.

Su construcción data de 1977 y es propiedad del Ayuntamiento. A día de hoy carece de aulas suficientes y de las 36 existentes, 7 incumplen la normativa y por número de alumnado, tendrían que pasar de 36 a 41, es decir, 5 aulas más “para rozar la legalidad”, recalcó la directora, al tiempo que añadió que el próximo curso necesitan urgentemente tres. “Tendremos que sacar un aula fuera del centro para infantil. Aún inutilizando espacios, transformando otros y con prefabricado, estamos saturados y todo tiene un límite”, expresó.

En lo que a discapacidad se refiere, el centro tampoco se acoge a la normativa: ningún baño está habilitado para discapacidades motóricas, 5 incumplen la normativa y están en condiciones justas de salubridad. Hay un único baño para 60 profesores. En el edificio matriz no existe ningún espacio adaptado, comenzando por la entrada principal que no facilita la entrada en silla de ruedas.

También el polideportivo se queda pequeño para acoger a 350 alumnos y conjugar sus clases con 4 profesores de gimnasia. Apuntaron, además, que entre éste y el edificio hay una pista que habría que llevar a la misma altura para evitar caídas y posibles accidentes.

sin espacios A esta situación de saturación y carencias de infraestructuras se ha llegado porque el centro ha asumido con los años nuevos modelos educativos y por la propia evolución de la localidad. Recordó la directora que desde su construcción se ha ido adaptando como ha podido a los sucesivos cambios.

Tras la aprobación de la Ley del Vascuence (1986) Aoiz eligió tener modelo D (euskera) y pasó de un modelo a tres con otras necesidades.

El colegio se amoldó con aulas más pequeñas. El Ayuntamiento comenzó a levantar tabiques para dividir las más grandes. Después, asumió la secundaria y pasó a centro IESO, con un anexo al matriz y la creación de seis aulas, con rampa para minusvalía y ascensor. La posterior reconversión de la anterior casa del conserje les dotó de dos aulas más. Hace 20 años se instalaron los prefabricados, dos aulas y dos baños que pronto fueron insuficientes.

“No nos queda ningún espacio para levantar o tirar. Necesitamos una medida integral”, resumió Inma Beroiz.

En los seis años que lleva al frente del centro, el equipo directivo ha llevado adelante la demanda de un nuevo edificio para la ESO. Había un informe técnico pendiente del curso 2011-12, “No hemos obtenido con el cambio de Gobierno respuesta potente de un centro nuevo, aunque sí ha habido otras”, afirmaba la directora, en referencia a que el próximo curso contarán con un director para ESO (ahora sólo tienen uno) y media jornada en plaza de minorías (queda completa).

REPUNTE MATRÍCULAS “Los movimientos sociales y migratorios acontecidos en la villa se reflejan también en el colegio y causan repuntes de matriculación que tiene que asumir”, relató Beroiz.

En la última década la matriculación aumentó por la vuelta de jóvenes parejas a un entorno rural cercano a la ciudad (a 28 km) y más barato para comprar vivienda y establecerse. Al tiempo, Siemens Gamesa concentró en Aoiz las diferentes empresas en su haber con la consiguiente movilización e instalación de gente joven de su origen.

Llegaron después las familias inmigrantes, con la firma del Plan de Acción y Acogida Humanitaria a Inmigrantes entre el Gobierno de Madrid y el de Navarra, que tiene en Aoiz cuatro dispositivos, 24 personas acogidas, con 18 matriculadas en el colegio.

“Es un movimiento continuo y el colegio no está preparado para recibir a este tipo de alumnado, nos faltan recursos humanos y orientación. Es una ruptura importante para las aulas porque la inmersión es directa y hay que tener en cuenta la dificultad del idioma y la carga emocional que traen”, explican desde el centro.

La repercusión requiere, aseguran, de un tratamiento integral y de una dotación de recursos como otros similares de Navarra, Villafranca o Santesteban (Aoiz tiene dos personas y media menos con el mismo volumen de alumnado) si bien reconocen la tipología del agoizko especialmente compleja: 3 modelos, comedor y transporte. “El programa tiene que llegar acompañado de recursos. Hay que determinar necesidades y cuantificarlas e incluir al centro entre los que necesitan intervención urgente”, apostilló el alcalde. La visita acabó con el recorrido por las instalaciones en la que los miembros de la comisión asistentes -Carlos Jimeno (PSN), Isabel Aranburu (Geroa Bai), Miren Aranoa ( EH BIldu, quien solicitó el encuentro) y Mariano Herrero (UPN)- comprobaron lo dicho.

Cifras . El CP San Miguel IESO Aoiz cuenta con 493 matrículas atendidas por 60 profesionales. 77 alumnos y alumnas son de otros pueblos. 7 líneas de autobús. Modelos A, G y D.

Carencias. Las carencias se hallan en las infraestructuras, no cumple la normativa, pero también en los recursos humanos.

inma beroiz “hemos llegado al límite ”

La directora asegura que no queda ni un espacio y que para el próximo curso necesitan 3 aulas.