Ribaforada - Colectivos y ONG denunciaron ayer que la actuación del Ayuntamiento de Ribaforada en el caso de la deportación del vecino senegalés Modou Khadim Sow, acaecida el pasado 6 de mayo, ha sido “especialmente perversa”, al considerar que la institución “no sólo ha desprotegido a Modou sino que ha colaborado mediante engaños y de forma directa con la deportación de uno de sus vecinos, excediéndose en sus funciones y competencias”. Asimismo, las entidades que ayer expresaron este malestar leyendo un comunicado a las puertas del Consistorio del municipio señalaron que “el Ayuntamiento se ha hecho cómplice de uno de los mecanismos más atroces y practicados del racismo institucional, las expulsiones exprés”.

Alrededor de una decena de ciudadanos de nacionalidad senegalesa del municipio ribero y representantes de las entidades que firmaron el comunicado escenificaron una protesta que se repetirá este próximo sábado 18 de mayo en la manifestación convocada a las 19.00 horas en el casco urbano de la localidad. Uno de los aspectos que resaltaron en su lectura fue el hecho de que la expulsión exprés de Modou se realizara “con la connivencia de una administración pública”. “Ha sido el Ayuntamiento de Ribaforada el que se ha prestado al engaño haciendo uso de un acto administrativo en forma de citación a sabiendas de no cumplir el fin mencionado”, decía el texto.

Javier Urroz, miembro de la plataforma Papeles y Derechos Denontzat, fue más allá y destacó que no conocían casos similares al del municipio ribero, en los que estuviera involucrada la propia administración local. Las entidades que se han movilizado por el caso Modou insistieron en que la legalidad del procedimiento utilizado por el Consistorio está “muy en duda” y en que esperan una resolución del Defensor del Pueblo de Navarra ante lo que entienden que “podría constituir un indicio de prevaricación”. “Los ayuntamientos constituyen el peldaño más cercano de la administración pública para las personas que viven en un pueblo o ciudad y deben garantizar los derechos y protección de todos sus vecinos con independencia de su origen o situación administrativa”, rezaba el comunicado.

Los hechos Modou Khadim Sow, que llevaba prácticamente una década en España, recibió una carta del Ayuntamiento de Ribaforada en su domicilio, donde se le citaba para solventar un trámite relacionado con su empadronamiento. Al acudir a la cita, fue detenido y trasladado a dependencias policiales por agentes de la Policía Nacional y expulsado “en menos de 48 horas” a Senegal, su país de origen. Los colectivos denuncian que “no les consta” que contara con asistencia jurídica a la hora de tramitar la deportación y que Modou “no sabe leer”, por lo que argumentan que su capacidad de actuación en dicha tesitura fue limitada.

Por su parte, el alcalde del municipio, el socialista Jesús Mari Rodríguez, se remitió en su réplica a una nota de prensa en la que argumentaba que el Consistorio se limitó a acatar un requerimiento policial para hacer efectiva la orden de expulsión que existía sobre ese ciudadano y que venía motivada por el hecho de que tenía antecedentes penales por la comisión de varios delitos, entre ellos falsedad documental y venta ilegal, y una orden de expulsión desde 2015”.

Colectivos firmantes del comunicado. El comunicado leído ayer ante la casa consistorial de Ribaforada lo firman la Asociación de Senegaleses de la Ribera, Médicos del Mundo Navarra, Papeles y Derechos Denontzat, SOS Racismo Navarra, la Asociación Flor de África, Karabana Mugak Zabalduz Nafarroa y África Unida.

Beatriz Villahizán “Se está lanzando un mensaje de miedo y desprotección a una parte de los vecinos”