- Volverán a sonar los txistus, regresarán las rondas joteras, bailarán sus faldas los gigantes. Habrá que esperar, aguardar con temple y reunir ganas para el 2021, pero Tafalla retomará sus fiestas con "más ganas que nunca". El Ayuntamiento de la ciudad anunció ayer la suspensión oficial de sus fiestas patronales para este año, una decisión que aunque ya era "más que evidente" tuvo ayer su confirmación municipal.

"Las fiestas de nuestra ciudad nos dejan días de gozo y emoción. Días que esperamos ansiosos para disfrutarlos con nuestros seres más queridos, dejando a un lado todo un largo y duro año. La música lo impregna todo y es momento para abrazarnos, besarnos, bailar, cantar, reír y compartir buenos momentos con nuestra gente", leía el comunicado de Jesús Arrizubieta, alcalde de Tafalla, quien reconoció la "imposibilidad de celebrar las fiestas con las exigencias evidentes que garantizan el cumplimiento de las medidas sanitarias". El alcalde señaló que la "triste noticia" ha llegado con el consenso y la responsabilidad de todos los grupos municipales, quienes también quisieron manifestar su "firme determinación de ayudar, en la medida de lo posible a los sectores que se van a ver más castigados por esta decisión".

Los bares y restaurantes se convierten en los grandes perjudicados con la suspensión de las fiestas, pues los días de agosto son para ellos parte importante de la recaudación. "La hostelería se ve doblemente afectada porque durante la semana de fiestas hacen un ingreso extra que les viene bien para todo el año", comentó Arrizubieta, y no olvida que es precisamente este sector el que ya lleva "acumulado un gran daño económico" por la pandemia.

Además, el Ayuntamiento ha contado con la colaboración de los colectivos que participan en el día a día de las fiestas y con los que habitualmente se trabaja para que animar la ciudad con sus actos. "Hemos constatado con la mayor parte de los propios colectivos y asociaciones locales que dan vida y color a nuestras fiestas que lo procedente en estas circunstancias es la suspensión", concretó Arrizubieta. El primer edil quiso mandar un mensaje de solidaridad y compromiso a la ciudadanía y pidió "el mismo compromiso que hace diez meses se vivió con las inundaciones".

Por su parte, Jacinto Goñi, concejal de Festejos, anunció que la semana que viene habrá una reunión con los diferentes colectivos involucrados en las fiestas para ver qué ideas tienen ellos "para poder realizar actos que no sean multitudinarios y garanticen las medidas". En este sentido confirmó que "aunque de ninguna manera se podrán celebrar las fiestas como las conocemos" quizás se pueden realizar pequeños actos, aunque "hay que estar pendientes de la evolución de la pandemia".

La pena, la resignación y la responsabilidad se acumulaban ayer entre los vecinos de Tafalla, quienes, a pesar de esperar la noticia, su confirmación llegó con desencanto. "Es una mala noticia, la asumimos, pero con mucha pena y desilusión", confirmó Asier Marco, de El Cierzo, una de las tres peñas de la ciudad del Cidacos. Aunque conocedores de las limitaciones obvias, las peñas de Tafalla no descartan poder realizar algunos de los encuentros habituales "con las restricciones que sean necesarias". "Queremos hacer alguna cosa pero depende mucho de lo que se nos permita hacer y de cómo nos encontremos en agosto, porque nunca se sabe", comentó Marco.

Hay una idea que ronda El Cierzo y es la de mantener el café concierto, donde se juntan los socios de las peñas tafallesas antes de ir a los toros. "Será difícil porque este año no va a haber toros pero estaría bien que por lo menos eso se pudiera mantener, o por lo menos, algo parecido", ahondó Marco, quien comentó que en el caso de poder hacerlo, la idea sería "contar con los grupos de Tafalla para promocionarlos y por comodidad para todos". Aunque recalca que ahora hay que demostrar "una capacidad de improvisación" para ir adaptando los días a la evolución de la crisis sanitaria.