Funcionarios de Montepío
EL pasado 4 de marzo escribía el señor Javier Garín sobre las medidas para ahorrar en personal que el señor vicepresidente del Gobierno de Navarra, señor Jiménez, había propuesto.
Entre otras cosas decía: "en la empresa privada no se paga lo que no se trabaja". Mi réplica es la siguiente: "en la empresa pública hay trabajos que se realizan y no se pagan". Haga usted mismo la cuenta del dinero que yo hubiese percibido, por ejemplo en la Volkswagen, por trabajar durante 34 años más de 1.200 sábados y otros 500 domingos que trabajé sin cobrar mis 10 primeros años de funcionario. ¿Le parecería bien que las fábricas quitasen los incentivos por trabajar estos días? Yo jamás me he quejado. Se lo explico enseguida.
A usted no le parece de recibo, entre otras cosas, que el funcionario cobre 473 euros de ayuda familiar, o perciba prestaciones especiales por asistencia sanitaria. Le contesto. Como la gran infinidad de los funcionarios, entré a formar parte de la Función Pública tras aprobar una convocatoria de oposiciones en febrero de 1978. Al tomar posesión de mi cargo adquirí unos derechos y unas obligaciones. Entre los derechos: un sueldo del nivel, los complementos que había por aquel entonces, y esto que decía textualmente la convocatoria: "Se les abonará ayuda familiar y se les prestará asistencia sanitaria". La ayuda familiar era de 393 pesetas por un hijo que tenía entonces, y la asistencia sanitaria era la prestación que había en Diputación, el Sistema de Montepíos. Si hubiese habido Seguridad Social, ahí me habrían encuadrado. Pero quiero recalcarle que estos derechos nadie me los regaló, sino que me los gané al aprobar la oposición. Entre las obligaciones estaba trabajar en la Jornada tipo B (en horario flexible, con sábados y domingos incluidos). Lo que no puede ser, y desde aquí apelo a nuestro vicepresidente, es que me respeten las obligaciones (seguir trabajando sábados sin cobrar), y quieran mermar mis derechos, ganados legalmente (asistencia sanitaria y ayuda familiar).
En lo referente a la jubilación voluntaria tres cuartos de lo mismo. Por Ley Foral 10/2003 de Pasivos del Gobierno de Navarra, una parte de los funcionarios del Montepío nos integramos en la misma, adquiriendo un derecho que es el poder acceder a una jubilación voluntaria a los 60 años, pero con la obligación de pagar una cuota mensual extra del 5,1%. Ahora ocurre igual; se nos quiere quitar el derecho, manteniendo la obligación. ¿Es esto legal? Señor Garín, le diré que desde 2003 habré pagado por este concepto más de 17.000 euros para cuando cumpla los 60 el próximo año, y aun me quedarán otros 10.000 más si continúo hasta los 65. Como verá, no todo es jauja en la Función Pública. Quiero recordarle además que a los funcionarios nos han congelado estos 3 años el sueldo, nos quitaron una media del 5% en 2010 y ahora, como colofón, nos proponen estas medidas de ahorro para la Administración, sin contar el IRPF propuesto por el señor Rajoy. Usted me dirá: otros están peor. ¡Cierto! Pero, ¿le ha hecho a usted algo parecido en su empresa? De cualquier forma, le recuerdo que generalmente los funcionarios entramos a trabajar tras aprobar unas oposiciones.
José Antonio Lacunza Ortigosa