Que no se enfaden en In & Out, esto no tiene que ver con ellos, que bastante hacen con seguir ahí, pero es que no me acabo de creer que la sala de exposiciones de la muralla de Baluarte, concebida en aquellos años de "despilfarro" cultural como el gran espacio para el arte y las llamadas grandes exposiciones (recuerden, sin ir más lejos, la suntuosa muestra sobre Navarra comisariada, y bien pagada, por Arbeloa, bajo el título Navarra, un futuro entre todos, que bien claro ha quedado a que futuro se referían) acabe convertida en un espacio cerrado que se abre esporádicamente con exposiciones que, enfocadas para el "ocio familiar", poco o nada tienen que ver con el arte y la cultura en general. Desde el Titanic a los trenes pasando desde hoy por los Click de Playmobil, sin duda todo un invento con el que generaciones enteras hemos jugado y que estará muy bien en los museos del juguete. Pero es que no hacen falta salas de exposiciones en un auditorio para estas muestras, para eso están los civivox y otros espacios, seguro que más económicos y mas accesibles para ese público familiar al que van dirigidas (parece que aquí la cultura y el arte estén reñidas con el ocio en familia). Esta ciudad tiene la manía de construir lo que no necesita y destruir lo necesario; igual que le da por hacer museos o centros temáticos de aquello que por su propia naturaleza no puede encerrarse en un espacio, sean los Sanfermines o las Huertas de Aranzadi, tremendo despropósito tratar de enseñar lo que es una huerta destrozando las que había y creando huertas de mentira, como las de Playmobil, solo que no es un juego.