¿Teledocencia o EOL (Educación On Line) o ERE (Enseñanza Remota de Emergencia)? La educación en los tiempos del Coronavirus
El día 12 de marzo, el Departamento de Educación de Gobierno de Navarra adoptó la
medida de cerrar los centros escolares durante lo que iban a ser dos semanas para frenar la
extensión del ya imparable Covid-19. Dos días después, el Gobierno de España decretó el
primer Estado de Alarma que, con sus sucesivas prórrogas, ha mantenido al país confinado
durante más de dos meses. Es indudable que se estamos viviendo momentos históricos y
excepcionales que están afectando a todos los ámbitos de lo que hasta entonces constituía
nuestra vida cotidiana.
Hasta aquí el macrorrelato de sobra conocido por todos. Resulta evidente que los centros
escolares no somos ajenos a estas circunstancias, a esta Historia, pero también lo es que la
respuesta ofrecida a las nuevas necesidades que se han suscitado en las familias ha sido
diferente en muchas de estas instituciones.
En el Colegio Jesuitinas Pamplona nos ha preocupado y ocupado desde el primer momento
de esta emergencia sanitaria cómo responder a las necesidades de las familias que han
confiado en nosotros. Y la respuesta ha pretendido ser coherente con nuestro modelo
pedagógico MEDAP (Modelo Educativo de Acompañamiento Personalizado) trascendiendo
los estrechos límites de lo estrictamente académico. Pero, además de la Historia, también
nosotros disponemos de nuestra propia intrahistoria. El confinamiento nos ha llevado a la
Teledocencia o EOL (Educación On Line) en lugar de a la ERE (Enseñanza Remota de
Emergencia). Sirvan estas líneas para explicar en qué se diferencian, cómo lo hacemos
y por qué lo hemos podido hacer.
Hay que ser, no obstante, justos: las escuelas, y en conjunto el sistema educativo, han
reaccionado de manera notable ante la pandemia. Cuando decimos 'escuelas' nos referimos
a docentes, alumnado, familias, administración,... Sin embargo esta reacción ha sido un
verdadero laboratorio de pruebas frente a una situación de crisis brutal. Las escuelas, cada
una a su manera y ritmo, han respondido en modo emergencia: sin planificación, sin
previsión, en poco tiempo, con los medios insuficientes, con coraje,... y lo han hecho bien.
En estos momentos, sobre todo, están llevando a cabo Enseñanza (no saben si también
aprendizaje), que es Remota (en la distancia, no presencial) y es de Emergencia (sin
tiempo, sin planificación ni medios, sin manual de instrucciones,...).
En el colegio Jesuitinas Pamplona también nos vimos sorprendidos por la crisis del
Coronavirus. Para ser precisos, nuestra respuesta inicial pasó por una breve fase ERE, pero
antes de una semana ya habíamos pasado a la Teledocencia o EOL. ¿Por qué la pudimos
poner en marcha en tan poco tiempo, de manera efectiva y con éxito? Porque el
colegio llevaba una trayectoria de cambio y adaptación a lo largo de, al menos, los últimos 8
años. Un cambio sistémico que ha afectado a los cimientos de todo el colegio, es decir, que
trasciende al docente individual, al aula concreta, a la materia específica, a la etapa
determinada.
Este cambio sistémico se propuso de manera razonada y participada, en su momento, a
toda la comunidad educativa y fue ampliamente respaldado. Las familias, los docentes, y
el alumnado confiaron en la propuesta de un nuevo Modelo EDucativo de
Acompañamiento Personalizado #MEDAP. De ahí, que el término que, tras el impacto o
"bofetada" inicial, mejor describa nuestra labor en estos meses sea el de 'naturalidad' en la
situación menos natural, esto es, más alejada de lo que nos viene a la mente al pensar en
la "naturaleza de la escuela".
Este modelo ha permitido soportar toda la tensión y el impacto inicial que la crisis han
llevado aparejados, ha permitido adaptar recursos y energías para solventar los problemas e
incertidumbres y ha posibilitado desarrollar la EOL, bajo el leitmotiv que animó su
nacimiento: dar respuesta a todas las necesidades educativas del alumnado y a las de sus
familias, el famoso "alumno en el centro". Todo ello, aunque se puede explicar más, porque:
— El alumnado y los docentes han mantenido su horario presencial de lunes a
viernes, con sus 6 sesiones diarias, con todas sus asignaturas. Las familias han
mostrado su satisfacción en la medida en que les hemos ayudado a gestionar el
tiempo de sus hijos e hijas, no han perdido sus hábitos de trabajo y no han tenido la
sensación adicional de "pérdida del curso escolar",
— No ha hecho falta resolver el falso dilema de si en la 3ª evaluación había que
repasar y reforzar o avanzar. Nosotros tenemos claro que debíamos volver a
trabajar sobre los objetivos marcados al inicio de curso utilizando nuevos contenidos
— La evaluación por objetivos realizada ha permitido evidenciar la situación y
progreso del alumnado frente a los objetivos de aprendizaje.
— La docencia compartida en los ámbitos y proyectos ha facilitado sobremanera la
atención personalizada y son un apoyo vital para el docente.
— La tecnología, al servicio de la pedagogía y del modelo, de la que dispone el colegio,
cuyo alumnado lleva años usando y cuyo profesorado maneja con soltura es un
soporte de interacción y un canal de comunicación vital. Más allá de los
reconocimientos obtenidos como centro de referencia Google for Education,
este entorno y sus herramientas se han revelado, en una situación alejada de
nuestra labor académica habitual, especialmente útiles para la consecución de
nuestros fines educativos. Este entorno Google ha facilitado la docencia
incluso en las etapas más tempranas y con un alumnado menos autónomo
como son las de Educación Infantil y Educación Primaria. Así, la creación de un
SITE semanal con actividades y vídeos con explicaciones del profesorado del centro
ha ayudado a las familias en la gestión del confinamiento de los más pequeños.
— El dominio de las herramientas telemáticas por el profesorado ha permitido la
celebración de eventos virtuales tales como el Día de la Educación Física, el Congreso
Científico MEDAP, conferencias IAEE, Proyectos etwinning, etc, publicados en el blog
del colegio.
— El acompañamiento al alumnado y familias no se ha interrumpido durante el
confinamiento y se concreta en la realización, en modo virtual, de entrevistas
semanales entre alumnos y tutores, entre tutores y familias, entre las
orientadoras y los alumnos y/o familias, las reuniones con las familias para
presentar las opciones de cara al curso 20-21, las puertas abiertas para la ESO
y Bachillerato con familias ajenas al colegio.
— Las reuniones de coordinación presenciales se han mantenido en modo
virtual: entre docentes, entre equipos de trabajo, entre grupos de vida colegial, con
otros colectivos de apoyo y cobertura social
— El colegio Jesuitinas forma parte de la red de Escuelas Solidarias y, nuevamente,
más allá del adjetivo ha querido traducir esta solidaridad en acciones concretas con
el fin de no ahondar en la famosa "brecha digital". Ante el retraso del Departamento
de Educación en proporcionar conectividad al alumnado que no la tenía, en el
centro -con ayuda económica de profesores- hemos facilitado la conexión a
internet a varios alumnos y alumnas.
— El colegio presta sus servicios educativos a unas familias que se encuentran en
diferentes situaciones socioculturales, laborales, económicas, de origen y etnia,
posibilitando una vez más que el impacto negativo a nivel educativo de esta
crisis no se cebe con los más desfavorecidos; y que, lejos de incrementar las
desigualdades sociales, se minimicen ya que se dan las mismas oportunidades
a todos por igual; no suponga perjuicio alguno para ningún alumno o alumna,
independientemente de si quiere titular en Bachillerato y superar con nota la EBAU o
promocionar de 6º de Primaria a 1º ESO.
— No podemos ni queremos olvidar otras necesidades relacionadas con la dimensión
trascendente y evangelizadora. Es obvio que la pandemia nos ha puesto contra las
cuerdas: mIembros de nuestra comunidad educativa se han visto golpeados
cruelmente por la enfermedad: en estos momentos de angustia y desasosiego se
hace más necesaria que nunca una Palabra que nos impulse y sostenga, que
nos permita compartir juntos nuestros miedos, nuestras limitaciones y nos
permita afrontar con serenidad estos momentos. En este tiempo se ha abierto un
espacio en la web, ESPACIO DE ENCUENTRO, cuyo objetivo era traer de manera
especial a todos los seres queridos de nuestra comunidad educativa que hubieran
fallecido. Espacio para acompañarnos y sostenernos desde la distancia en el dolor.
— Se han potenciado distintas actividades externas, como por ejemplo, la Semana
de Acción Mundial por la Educación, en la que hemos participado prácticamente todo
el colegio y donde el alumnado ha constatado que el colegio sigue abierto pues lo
forman los alumnos y profesores y ese contacto no se ha perdido durante el
confinamiento..
— Y cómo no, se pudo celebrar el 15 de mayo la Graduación online de los alumnos
de 2º de Bachillerato.
Hasta aquí nuestro relato; esta dolorosa pandemia ha servido como laboratorio para
testar, en sus condiciones más extremas, un modelo que, a tenor de las evidencias
antes aportadas, se ha revelado como válido.