El pasado mes de enero supimos la petición de 15 meses de prisión para una detenida el pasado 8 de marzo por un delito de atentado a la autoridad. Algo incomprensible para gran parte de la ciudadanía, máxime después de ver las imágenes de la iniciativa pacífica que se llevó a cabo ese día ante el Parlamento y la violenta y desproporcionada respuesta por parte de la policía. Y más aún cuando han dado carpetazo a la denuncia interpuesta contra la brutalidad con la que intervino la policía, que le causó lesiones a la detenida, justificando que la intervención fue completamente proporcionada. Una vez más, ante la palabra de la detenida, el movimiento feminista y gran parte de la ciudadanía han dado fielmente credibilidad a los testimonios de la policía.Para las mujeres que formamos el Movimiento Feminista de Iruñerria es también difícil de entender. Y, como hemos señalado en más de una ocasión, nuestra elección ante cualquier agresión, represión y criminalización será la autodefensa feminista, porque tenemos claro que las que nos cuidan son nuestras amigas y no la policía. Hoy recordamos el 8 de Marzo del pasado año. No sólo para denunciar la injusticia de la policía y la justicia navarra, sino también por las razones que nos llevaron a tomar las calles el año pasado. Salimos a las calles con fuerza para decir que estamos hartas. Para proclamar que este sistema heteropatriarcal-capitalista-racista pone por encima de las vidas los intereses económicos y que es urgente e imprescindible la necesidad de un sistema público y universal de cuidados. Para denunciar que la decisión de quienes garantizan el sistema y su supervivencia es la opresión de las mujeres de una manera estructural y de mil maneras diferentes. Y con estas reivindicaciones las feministas nos unimos, organizamos y salimos a la calle a resquebrajar el sistema juntas.Este año nos reafirmamos en lo realizado el año pasado. Nada ha cambiado. María Chivite y su gobierno no quieren saber nada de nuestras reivindicaciones, al contrario, quieren criminalizarlas y convertirlas en delitos. Las migajas y los discursos que ofrecen no son suficientes, nosotras queremos cambios reales y, mientras no se den, seguiremos en la organización y lucha feminista, imprescindible para seguir resquebrajando este sistema. El 8 de Marzo se acerca, y nosotras seguimos haciendo red y organizándonos. Volveremos a estar en las calles tintando de morado los mensajes que pretenden vaciar de contenido y blanquear el feminismo. Y tú, ¿te unirás a la lucha? Gora borroka feminista!

La autora es Miembra del Movimiento Feminista de Iruñerria