Los máximos representantes del PSOE (Partido Socialista Obrero Español) en provincias y España no sé si se dan cuenta de que están al borde del abismo. En Francia han vivido una debacle ganada a pulso. En España van camino. Y sería una pena. El hecho de defender a capa y espada el mundo institucional, sus leyes, el sistema, los está llevando al borde. Espiar a los contrarios, por muy legal que lo quieran disfrazar, cambiar de opinión contra el Polisario y abrazarse a Marruecos y su régimen, ponerle alfombra roja a un exrey corrupto y suma y sigue. El PAI apoyando más a las lenguas extrajeras que a la de casa, el euskera, le va a costar muy caro. Porque va en contra de la gente que se siente socialista. Y se acabó aquello de yo socialista hasta la muerte. La gente joven lo ve de otra manera. Y pronto lo van a comprobar. ¡Atentos!