Google rastrea cada día hasta 426 veces nuestra localización y la actividad que realizamos en Internet. Según una filtración de la asociación irlandesa Irish Council for Civil Liberties (ICCL), el gigante estadounidense controla todo lo que buscamos en el navegador y a dónde nos desplazamos cada día.Estos datos permiten a Google tener un perfil detallado sobre sus usuarios -qué les gusta e interesa, qué páginas web frecuentan, qué productos han comprado o están valorando comprar, etcétera- para luego venderlos a terceras empresas con el fin de ofrecerles publicidad personalizada.España es el tercer país de Europa más afectado por esta vulneración de la privacidad, por detrás de Reino Unido y Polonia. Según el análisis de ICCL, la plataforma rastrea y comparte 197 mil millones de veces al día lo que los usuarios europeos consumen en Internet. En Estados Unidos la cifra es aún peor, ya que asciende a 294 mil millones de veces.Como cabía esperar, Google ha respondido a estas filtraciones alegando que “no comparte información que pueda identificar personalmente a los usuarios”, aunque no ha negado que diariamente recopile enormes cantidades de datos. Los gobiernos y las grandes compañías tecnológicas deben garantizar la seguridad digital de los usuarios mediante la creación de un marco regulatorio que proteja los derechos personales y la privacidad por encima de los intereses económicos.