Maya jibariza a Barcina. El Museo de los Sanfermines, pomposo proyecto de aquella alcaldesa, reducido a un pequeño Centro de Experiencias San Fermín 365. Menor tamaño, enclave estratégico en ambos casos. Se va a restaurar el Cuerpo de Guardia del antiguo portal de Rochapea. A escasos metros, el corral de salida del encierro. Abajo, en vertical, la frustrada ubicación de “La fiesta entre las flores” (2001), un museo puente que conectaba las dos orillas del Arga. Inviable porque alteraba la imagen de la muralla, Bien de Interés Cultural. Sus arquitectos modificaron la idea ganadora del concurso internacional convocado al efecto: dos edificios-flor elevados sobre el suelo para salvar las riadas (2004). Barcina aparcó la idea. Se habían gastado unos 750.000 euros, la mayor parte en pago de honorarios profesionales a arquitectos e ingenieros. El proyecto regresó en 2008, con emplazamiento en el solar del antiguo parque de Bomberos (Media Luna). De momento, zona verde de esparcimiento humano y canino. La superficie útil interior del Cuerpo de Guardia a restaurar es de 84 m2. El puente premiado tenía 20 metros de ancho y 150 de largo (unos 4.500 m2 de superficie) y los dos edificios alternativos posteriores sumaban casi 8.500 m2. La superficie a ocupar en la Media Luna, inferior a 4.000 m2. También la comparación de costes es de vértigo: 13 millones el puente, casi 33 los dos edificios, 18,5 en Media Luna. El contrato de la obra civil de la restauración supera algo los 400.000 euros (poco más de la mitad de lo derrochado por la megalomanía de Barcina). Los contenidos, aparte. Jibarización de superficie y presupuesto. Este Cuerpo de Guardia es el único que se conserva de las seis puertas del recinto fortificado de Pamplona. El derribo del portal de Rochapea en 1914 no afectó a este pequeño edificio. Quedó en desuso. Estuvo a punto de ser derribado. Un pleno del Ayuntamiento (9-diciembre-1982) lo salvó de la piqueta. SF-365, su futuro.
