El azar tiene estas cosas. Llega una nueva edición de Pamplona Negra, la cita anual con la literatura de este género y con una de sus secciones estrella ‘El crimen a escena’, y al mismo tiempo a pocos kilómetros se produce un crimen real, sin necesidad de escenificaciones. Vivimos en una ciudad segura, en una zona de baja criminalidad, pero no por ello libres de que de vez en cuando se produzca un asesinato. Ayer ocurrió, en Villava, en circunstancias que aún se investigan y hace unas semanas moría otro joven en Donosti también acuchillado. Da que pensar, y sobre todo exige que se intensifiquen determinadas medidas de seguridad en espacios donde la violencia empieza a campar peligrosamente. Pero volviendo al azar y esa negra suerte que durante algunas ediciones ha hecho coincidir la cita con la literatura de crímenes y misterios con algunos de los sucesos más negros ocurridos en Navarra. Pamplona Negra se ha ido consolidando como una cita clave en el calendario, a la sombra de otras semanas negras literarias. Durante estos días, los amantes de este género, los autores y autoras que ficcionan con la muerte, los lectores y lectoras, los policías e investigadores que se encargan de esclarecer crímenes reales, se darán cita para poner el foco en el valor de la literatura, sea de intriga, de suspense, de espías, de crímenes, de detectives... Porque en el fondo se trata siempre de poner en valor la lectura, sea del color que sea.