Duerme nueve horas diarias repletas de descanso, son horas que llenan de sentido hasta el borde el adjetivo reparador cuando acompaña a sueño. De niña vendió mochis en la tienda familiar de un pueblo que ya fue absorbido por Naha. En esta ciudad costera al sur de la isla japonesa de Okinawa el santuario Naminoue observa desde el acantilado a los barcos que parten y atracan cada día en el puerto mientras vigila con cierta curiosidad a unos centros comerciales que podrían ser sus nietos. A sus 15 años Kane asistió a la reconstrucción del templo tras la guerra. Era 1953. Para cuando las puertas acristaladas de los centros comerciales comienzan a deslizarse por sus ranuras metálicas cada mañana, Kane ha tomado té, una bola de arroz y un pescado pequeño hervido y ya está regando las azaleas y los lirios de su jardín con un cuenco de cerámica que rellena de agua en un cubo. Se agacha, se incorpora, se estira para retirar una hoja seca. Su jardín es más que suficiente, también porque está a la sombra de un gingko y un arce y porque incluye una huerta. Kane les dedica dos horas diarias. No sabe aún que vivirá hasta los 119 años. Quizá tampoco que la sopa de tinta de calamar que toma es desintoxicante y que el melón amargo que su vecina le intercambia por pepinos reduce el azúcar en sangre. La diabetes no abunda en Japón. Los sofás, tampoco. Kane se sienta y se levanta del suelo de su salita unas veinte veces diarias, no necesita hacer sentadillas. Cada tarde pasea junto al mar con sus amigas, se ríe, respira hondo, juega con ellas al othello un par de días a la semana y dedica un tiempo a la caligrafía. Todo esto convierte a Okinawa en una de las zonas azules del planeta, mayor longevidad, menor índice de demencia y problemas cardíacos. Tener un ikigai también es importante. Un propósito, un objetivo. La huerta que cultivaba mi padre, la partida de cartas de mi madre cada tarde, el café con las amigas, la clase de baile, o de yoga, o de pintura. Vivir más quizá no sea tan importante. Vivir mejor, sí. Y conocemos el secreto.