Como un jugador de baloncesto no puede lanzar un tiro libre y coger el rebote si no toca el aro, Chima Moneke (Baskonia) rizó el rizo ante el Estrella Roja y lanzó al borde exterior del aro, con tal puntería que el balón volvió directo a sus manos y su equipo ganó (87-85). Si acaba siendo muy fácil realizar esa treta, la acabarán prohibiendo... Y en ésas estamos cuando un jugador del Rennes lanza un libre directo ante el Villarreal , el balón pega en el larguero y le vuelve a ese futbolista, sigue la jugada y marca el Rennes... pero el VAR anula el gol.

Una norma casi desconocida, por lo infrecuente (se ve más en penaltis) y que nos parece absurda, porque así como en el basket sería muy fácil lanzar un tiro libre al tablero y tener ventaja con ello, es imposible que lo del Rennes se haga a propósito. Porque nadie tiene tanta puntería y porque, si alguien la tuviera, su mejor manera de aprovecharla no sería buscar esa carambola, sino tirar a gol.