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Cuando Navarra iba a ser Texas

Hace 75 años, los periódicos locales daban cuenta de los planes de prospecciones en la esquina noreste de Navarra. No era la primera vez ni tampoco sería la última

Cuando Navarra iba a ser TexasArchivo

¿Pueden imaginar cómo sería hoy Lumbier y la zona cercana del Pirineo de haber prosperado la búsqueda de petróleo? ¿Caen en la cuenta de lo que hubiera supuesto para su desarrollo industrial, para la economía local, para el crecimiento de la población, para las comunicaciones con el resto del territorio? ¿Y en su impacto negativo en el medio ambiente, el cambio de usos y costumbres, el urbanismo desenfrenado, la influencia política y social de las grandes compañías..? Hace 75 años, los periódicos locales daban cuenta de los planes de prospecciones en la esquina noreste de Navarra. No era la primera vez ni tampoco sería la última en la que la búsqueda del oro negro se convertía en algo así como dar con el Santo Grial que haría posible el milagro de traer prosperidad en una larga postguerra en la que todavía circulaban las cartillas de racionamiento.

Acostumbrada a vivir desde tiempos remotos de la generosidad del suelo (de la agricultura), aislada de los planes industriales, Navarra hubo un tiempo en el que fio su futuro al subsuelo. Hay constancia de sondeos hasta los 1.600 metros de profundidad en Gastiáin (Valdelana) en 1923, y luego, de manera intermitente durante años, los zahorís del líquido oleaginoso probaron fortuna en localidades como Lerín, Marcilla, Cizur… Navarra y Burgos fueron los lugares más perforados al menor indicio de una bolsa de gas y presencia de una pequeña cantidad de petróleo. Pero nada. Frustración. Otro castillo de crudo a tomar viento.

El reciente Balance Energético de 2024 realizado por el departamento de Industria del Gobierno foral cifra 2.785 millones de euros el gasto anual en combustible. Por contra, las fuentes renovables producen ya el 68% de la electricidad. La transición energética avanza por pura urgencia y para sustituir a las fuentes fósiles, altamente contaminantes ¿Imaginan un paisaje sembrado de pozos abandonados? ¿O los efectos de una reconversión industrial tras años de bonanza?

El Pensamiento Navarro se preguntaba en la portada del 27 de julio de 1950: “¿Será Navarra algún día una región petrolífera?”. Y ampliaba en el texto: “¿Veremos convertida a Navarra en un punto estratégico, codiciado por las compañías y los gobiernos, siempre tras la posesión del oro negro..?”. El sueño franquista de un nuevo Texas.