La noticia corrió como la pólvora. El MC, rapero o lo que sea Pablo Hasél, fue detenido por apología del terrorismo. Un joven de 22 años peligrosísimo para la sociedad. Sus letras son balas que no matan, pero balas que hieren a una monarquía española obsoleta y caduca. No dejo de pensar en qué país estamos, en el que la libertad de expresión se paga con la cárcel. Esto me recuerda a la inquisición, allá por el S.XV, cuando no podías decir una palabra negativa de la monarquía vigente porque estabas muerto al día siguiente. Ahora es el turno de que salgan todos los bufones de Juan Carlos I, Rey de España por la gracia de Dios y de Franco, a aplaudir esta detención. De todos modos, y que me perdone su familia, pero esto no deja de ser una buena noticia, ya que muestra que el Estado español teme a la juventud de verdadera izquierda que puede provocar un cambio en esta sociedad podrida.