Ante las recientes medidas de ajuste y futuras privatizaciones del Gobierno de Navarra en la Sanidad pública, queremos aclarar lo siguiente.
La cocina que tenemos en los hospitales reúne los requisitos que nuestros representantes políticos dicen que están buscando en su gestión. eficacia y eficiencia.
Se trabaja muy bien en la cocina. El rendimiento es alto y la capacidad práctica ante los imprevistos, también. Es una comida con garantía de calidad.
-Excelente materia prima.
-Alimento adecuadamente tratado y condimentado.
-Higiene máxima.
Como consecuencia de ello, ausencia de intoxicaciones.
La finalidad es contribuir a la curación del paciente, aunque una conocida política diga "que el enfermo no distingue una comida de otra".
La salud es un bien muy preciado. Hay que cuidarla y ustedes tienen la obligación de gestionar bien los recursos públicos en nuestros hospitales y no entregarlos a empresas privadas que su finalidad es la rentabilidad propia.
-No busquen fuera lo que ya tienen.
-No nos engañen ni se dejen engañar.
Si las razones de la medida son otras, digan la verdad.
Porque si no van a gestionar los servicios públicos, ¿qué hacen?, ¿para qué los necesitamos? ¿a quién representan?
Antes de firmar un decreto de esta naturaleza, es importante que recuerden que hay que administrar con equidad el dinero que es de todos-as y para el bien de todos-as.