Hace aproximadamente un mes estuvo usted en el barrio de San Jorge-Sanduzelai (dentro de la campaña El alcalde te escucha) para recibir sugerencias y proponer soluciones a los problemas de Buztintxuri y San Jorge. Tuve la oportunidad de intervenir (como la mayoría de las personas que quisieron hacerlo), planteándole algunas cuestiones de fondo sobre estas visitas suyas a los barrios, como que no fuera una simple campaña de imagen, que cristalizara en equipos mixtos (Ayuntamiento-barrio) de trabajo para solucionar problemas complejos, que tuviera una asignación presupuestaria, etcétera.

Además, y este es el asunto por el que escribo, le comenté que me parecía un muy mal ejemplo que el alcalde y concejales que presidían la sesión estuvieran consumiendo agua embotellada de una marca privada. Entre otras razones, le expliqué que las aguas minerales embotelladas tienen precios entre 500 y 2.500 veces superior al de nuestra agua del grifo, en el caso de algunas (de superlujo) salen a 5.000 veces más, lo que está provocando una lucha enconada por hacerse con la concesión de manantiales y acuíferos naturales, cada día más privatizados, para conseguir beneficios mil millonarios a un coste mínimo. Le dije, como ejemplo, que si el botellín de aproximadamente 250 cc que tenían cada uno de ustedes en la mesa tenía precio de 1 euro, la misma cantidad de nuestros grifos nos saldría a 0,001 o 0,002 euros. Y para más inri, la calidad de nuestra agua, la de la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona, es extraordinariamente buena, superior según muchos estudios y análisis a la mayoría de las privadas embotelladas.

El día 6 de marzo me vuelvo a encontrar en la prensa con la fotografía adjunta. La única diferencia con la que vimos hace un mes es la presencia de la concejala señora Lazcano en vez del concejal señor Polo. Los botellines de agua vuelven a ser de marca privada. A pesar de que hace un mes usted dio a entender que aceptaba mi crítica y, en efecto, es un buen ejemplo público de austeridad y sostenibilidad que el alcalde consuma agua del grifo, mucho me temo que dicha aceptación fue solo de fachada. Puede parecer solo un detalle, pero para poder hablar de la importancia vital del agua y del ahorro en su consumo, es un gesto muy significativo. Es evidente que, al menos en este tema, el alcalde no escucha.