Mientras los sucesivos gobiernos de España, tanto del PSOE como del PP, están imponiendo brutalmente al conjunto de la clase trabajadora recortes en derechos sociales, laborales, políticos, aprobando una salvaje reforma laboral, desprotegiendo socialmente a la ciudadanía, observamos como el jefe del Estado español, Juan Carlos I, está campando a sus anchas y cazando alegremente en un país de Africa, en concreto en Botsuana. Botsuana se encuentra en el sur del continente africano, a unos de 8.500 kms desde Gipuzkoa. Mientras practica la caza, se accidenta y hay que evacuarlo urgentemente a Madrid. Todo esto cuesta un riñón, y observamos que ante semejante derroche económico la clase política calla. Hechos de esta naturaleza demuestran la cara dura y cómo se ríen a la cara de la gente tanto el jefe del Estado como la clase política. Sería bueno en ir pensando en eliminar parásitos tan caros como es la casa real. Casa real como se ha demostrado esta semana que es muy amante de las armas, a la vez vagos y que no pegan un palo al agua. Todos los accidentes que han tenido los distintos miembros de la casa real han ocurrido en cacerías, fiestas, momentos de ocio y nunca trabajando.
Señores políticos, tienen dónde recortar gastos inútiles y donde la ciudadanía posiblemente aplaudiría con entusiasmo como es eliminando de inmediato la casa real. Siga así Juan Carlos I, que contigo en un futuro no muy lejano diremos alto y claro: viva la República.