Ante las intenciones del Gobierno de Navarra de modificar el Decreto Foral por el cual se regulan las escuelas infantiles, las asociaciones de padres y madres de las Escuelas Infantiles Egunsenti e Izartegi queremos mostrar nuestro más absoluto rechazo a dicha reforma.
El actual Decreto (aprobado en 2007) tiene un plazo de aplicación que finaliza en agosto de este año. Las EI de gestión pública cumplen, desde hace tiempo, con las ya mencionadas exigencias, por lo que las madres y padres de Egunsenti, así como las de Izartegi, vemos en la propuesta del señor Iribas un escandaloso ataque a la educación pública. La modificación del decreto pretende echar por tierra todo el trabajo realizado hasta ahora en nuestras escuelas, beneficiando así, de forma vergonzosa, única y exclusivamente a los centros privados, que en su mayoría incumplen la normativa vigente y que, con la ley en la mano, deberían quedar excluidos, a partir de agosto, de la denominación de escuela infantil (desde 2007 tiempo han tenido de hacer las reformas necesarias).
Tanto a la apyma de Egunsenti como a la de Izartegi nos preocupa especialmente los cambios que afectan directamente a la seguridad de nuestros hijos. Así mismo, nos parecen lamentables y humillantes las nuevas condiciones en las que pretenden que estén nuestros pequeños: aumento de ratios (20 niños por educador), reducción de los metros de patio o la eliminación de este, un único espacio para todas las actividades (dormir, comer, jugar?), falta de ventilación y luz directa? Señora Barcina, por si usted y su consejero aún no lo saben, las EI ni pueden ni deben ser meramente asistenciales, precisamente el hecho de ser centros educativos es lo que los convierte en escuelas infantiles, si no se llamarían aparcaniños. Así mismo, emplazamos al PSN a que se pronuncie al respecto, así como socio de gobierno, impida este despropósito ya que entendemos que no se puede justificar en Navarra aquello a lo que tanto se oponen en Madrid.
Las madres y padres de las escuelas infantiles no vamos a consentir, bajo ninguna circunstancia, que se ponga en riesgo la integridad física y moral de nuestros hijos. Por eso, en defensa de una educación pública y de calidad en el ciclo 0-3, nos oponemos frontalmente a la modificación del Decreto Foral 28/2007.