La risión. Después del amago del Partido Popular (PP) con intención de amargarle la fiesta, hacérselo creer y forzar al conciliábulo a Unión del Pueblo Navarro (UPN) con un candidato en el valle de Baztan, se supone que acompañado de otro destacamento de paracaidistas. Una vez conseguido su objetivo y asustado el partido regionalista por la posible competencia, los populares de la ínclita Ana Beltrán vuelven a mover desde su valle de Atez al predispuesto candidato, y lo trasladan como quien no quiere la cosa a Lesaka, total nada, 38 kilómetros Bidasoa río abajo. La verdad, talluditos como ya somos, es que poco queda por sorprendernos, a pesar de las descerebradas barbaridades y el todo-es-bueno-para-el-convento que estamos siendo obligados a soportar en esta precampaña campaña por parte de PP. Ciudadanos y los nostálgicos de las cunetas de 1936-1939 de Vox, pero asistir a semejante lo que haga falta (¿quizás con tal de medrar, conociendo el árbol al que se arrima?) y aceptar que le lleven a uno de un lado como si fuera un peón de ajedrez, no parece muy edificante. Aunque está claro, y cada día más, que por algún interés que se nos escapa y por una sorprendente “coherencia política” (¿?) cada uno y cada quien hace con su dignidad personal lo que le da la gana. Y si le plantean presentarse en Melilla, que también. Pues vale, pues muy bien, pues que me alegro. (Jodé qué fauna).
