Antes de comenzar estas oposiciones tanto tiempo demandadas, la polémica se veía venir : convocatoria confusa y tardía, lugar para la realización de las pruebas inadecuado (ruido, calor), mucha gente con ilusiones y pocas plazas.

Este año alguien ha decidido dar una lección a los aspirantes a maestros y maestras, descontando medio punto por cada error ortográfico en la prueba, sin límite en el descuento, como podría haberse planteado (es decir, un máximo de 2, 3 puntos de penalización, por ejemplo). Seguramente los lectores estarán pensando que un docente debe ser ejemplo de corrección ortográfica? y estamos de acuerdo. Sin embargo, en dos horas de tiempo para desarrollar un tema o caso en el que se tienen en cuenta muchos apartados (justificación teórica, metodología adecuada, atención a?) es difícil prestar atención a todos y cada uno de los aspectos señalados. ¿Quién no deja de poner algunas tildes (y no acentos, como erróneamente señalaban las bases de la convocatoria? 0,5 puntos menos para el autor o autora) en estas circunstancias? Y esto en aulas que llegaron a alcanzar los 33 grados. Por favor? prueben ustedes.

Tampoco se comprende cómo, por ejemplo, aspirantes que en anteriores convocatorias obtuvieron un resultado de 8, consigan, con el mismo tema y mayor preparación, un 1,4 ahora. ¿Tanto ha cambiado el nivel de exigencia?

En fin, parece ser que las aulas han estado ocupadas por maestros y maestras incapaces, y lo que es más grave, así volverá a ser cuando el departamento deba volver a recurrir a ellos al no cubrirse las plazas necesarias. ¿O no es así? Por supuesto que no. Las personas que han dedicado uno, dos años de su vida a preparar estas oposiciones tienen que saber que su nota no refleja su capacidad como profesionales, y mucho menos como personas.

En fin, no queremos culpar a los sufridos miembros de los tribunales, quienes se han visto obligados a seguir instrucciones con muchas de las cuales no estaban en absoluto de acuerdo. Esperemos que al menos estos decepcionantes resultados abran un proceso de reflexión en quienes corresponda para sucesivas convocatorias.

Mucho ánimo desde aquí a todos estos opositores y opositoras. (...).