El día 29 de julio tuvo lugar la Asamblea Constituyente de la Mancomunidad de la Comarca de Sangüesa, en la que el señor Javier Solozábal resultó elegido como nuevo presidente. Tras cuatro años de intenso trabajo, bien dirigido por Lucía Echegoyen, en los que se ha intentado poner en orden una institución sumida en el caos, la derecha ha vuelto a tomar el poder comarcal. Y esta vez lo ha hecho por derribo.

No sabemos si movidos por el rencor, por la sed de venganza o por querer mostrar su verdadero talante democrático, han decidido pasar el rodillo y dejar sin voz a nuestro pueblo Aibar/Oibar en la Permanente. Somos un pueblo comprometido con nuestra Mancomunidad y que siempre ha mostrado su predisposición de trabajo por el bien común, liderando muchos de los avances habidos en ella.

Siempre se había respetado la norma no escrita de otorgar, al menos, un representante a Cáseda, Lumbier, Sangüesa y Aibar/Oibar como localidades de mayor población. Así se hizo hace 4 años, cuando la izquierda, con mayoría absoluta, permitió a Cáseda y Lumbier mantener su representante, a pesar de no ser afines ideológicamente a la presidencia.

Hoy, sin embargo, nos encontramos con una Permanente prácticamente monocolor, después de que la derecha haya copado 7 de las 8 sillas. Se trata de un reparto irreal y que no representa la diversidad de nuestra comarca. Por supuesto, lo han realizado de una manera legal, ya que los estatutos lo permiten, pero muy poco ética, dejando a las claras su intención de mandato por decreto.

En sus primeras declaraciones tras su proclamación como presidente, Javier Solozábal, mostró su intención de trabajar duro para “hacer Comarca”. Imaginamos que se refiere a su comarca y la de sus amigos.