La decisión del Ayuntamiento de Pamplona / Iruñea de ceder espacio público para que algunos hosteleros instalen "sus terrazas" en verano, principalmente en el Paseo Sarasate, nos obliga a manifestar algunas reflexiones.De entrada, el espacio público es de todos y por tanto nadie puede disponer de él sin ajustarse a una normativa reglada y conocida, donde todos los interesados puedan acceder en las mismas condiciones de información y disponibilidad, como ha criticado ANAPEH. Además, en este caso no se ha llevado a cabo un proceso previo de información y participación, donde pudiera manifestarse la opinión ciudadana y del conjunto de los hosteleros.La cesión de los espacios públicos se ha planteado con algunos condicionantes, como que la vajilla sea de un sólo uso. Esta decisión va en contra de la Ley de Residuos de Navarra y de la Directiva Europea 2019/904 relativa a la reducción del impacto ambiental de determinados productos plásticos. El que los utensilios sean biodegradables no soluciona el problema, ya que fomenta el consumo de materiales de usar y tirar.Creemos que son absolutamente prescindibles el empleo de utensilios desechables (removedores, cubiertos, vasos, platos, monodosis de aceite, vinagre, sal, azúcar, tomate, salsas, pajitas€) que han vuelto a aparecer en la hostelería. El lavado en lavavajillas de los utensilios reutilizables es suficiente como medida de protección sanitaria. Por tanto, el Ayuntamiento debería persuadir a los hosteleros para que en la línea de la Ley Foral 14/2018 de Residuos y su fiscalidad, mantengan prácticas sostenibles dentro de una economía circular.Invitamos al Ayuntamiento de Pamplona / Iruñea a que rectifique y reconsidere la decisión tomada.