Este 2020 es un año importante para las bibliotecas, concretamente la Biblioteca General de Pamplona cumple 150 años, la Red de Bibliotecas cumple 70 años y la Asociación Navarra de Bibliotecarios/as cumple 25 años. Tres entidades que han vertebrado y vertebran nuestra comunidad como espacio cultural y de aprendizaje, y que durante años no se le ha prestado la atención que se merecían. Las bibliotecas son centros de proximidad por excelencia, lugares de encuentro, de intercambio de información, de libros y de experiencias. Son lugares que cumplen infinitas funciones, pero, sobre todo, su función principal es acercar la cultura a la sociedad, siendo, en algunos casos, los únicos espacios culturales de la localidad. No podemos obviar la función social que realizan las bibliotecas en nuestra tierra. Son espacios de seguridad para muchas personas que durante el día no tienen otro lugar en el que estar. Son espacios de información o comunicación por su libre acceso a internet, como forma de comunicarse con familias o amigos que viven lejos de nuestra comunidad. Espacio de encuentro entre diferentes con un mismo objetivo, la lectura, como única forma de aprendizaje, como momento de evasión ante los problemas cotidianos o simplemente como forma de culturizarse. En definitiva, las bibliotecas y sus profesionales forman parte del desarrollo de las sociedades en las que están asentadas. Están inmersas en la red de asociaciones, entidades y profesiones sociales que integran y mejoran la vida de los municipios.La figura de la bibliotecaria/o es principal y primordial en estos espacios. Son personas que se desviven por lo que hacen, personas formadas, con una dedicación plena al libro y todo lo que conlleva. Personas que cada día intentan innovar, proponer cosas nuevas para no caer en la dinámica fácil del intercambio de libros. Una gran labor que, en muchas ocasiones, no se ha tenido en cuenta y que desde hace unos años están consiguiendo demandas históricas que mejoran el funcionamiento general de las bibliotecas, con lo que eso conlleva a la hora de prestar los servicios que se prestan. La futura ley de profesiones de la cultura será el mecanismo necesario para que la figura de la bibliotecaria/o se estabilice, esté más especializado y cuente con un reconocimiento claro por parte de las instituciones. El Partido Socialista felicita a las tres entidades navarras por sus respectivos aniversarios, agradece la labor realizada, el aprendizaje continuo conllevando la adaptación a los diferentes tiempos vividos, manteniendo su esencia en todo momento.

El autor es portavoz del PSN-PSOE en la Comisión de Cultura del Parlamento de Navarra