Desde que esas casas se construyeron hay gatos callejeros en ese lugar y la mayoría de los vecinos están contentos y así nos lo manifiestan. Sin embargo hay un pequeño grupo, que en absoluto son representativos de los vecinos, que no quieren que los gatos estén ahí. Estamos muy cansados de estas personas. Llevamos dos años aguantando que nos traten de una manera incivilizada. Se dirigen a nosotros con exabruptos y a veces nos vemos obligados a llamar a la Policía Municipal.Cuando se protesta por algo se debe hacer con verdades no con falsedades.El nutrido grupo de personas que protestaron cuando se puso el primer iglú fue un matrimonio. Tres de los alimentadores somos vecinos de la Txantrea de toda la vida y podemos asegurar que el lugar donde se ha puesto el primer iglú no es en absoluto un sitio de encuentro y de juego. No hemos visto jamás a ningún niño jugando ni a nadie paseando. Los iglús se han puesto para proteger y cuidar mejor de los gatos. En ese entorno hay varios puntos de comida. En el primer iglú van a comer todos los gatos de ese punto. Tenemos vídeos que así lo demuestran. En el segundo iglú también entran los gatos de ese punto y estamos moviendo las cajas poco a poco para que los gatos de los puntos colindantes vayan a comer al iglú. Todo eso lleva un largo proceso, el cual estamos siguiendo de acuerdo con el área de zoonosis del Ayuntamiento de Pamplona.Por otro lado, no somos responsables si hay personas que ponen comida casera. Nosotros no lo hacemos. Cuando se nos dio un cursillo para obtener el carnet de alimentadores se nos dijo. Se debe poner comida húmeda y pienso, ambos específicamente para gatos. La comida húmeda es necesaria para los gatos ya que hay algunos que tienen mal la boca y no pueden comer pienso. Hay que quitarla a la media hora y eso es lo que hacemos.Nosotros alimentamos a los gatos como se debe y, les guste o no a esas cuatro personas, seguiremos haciéndolo, ya que consideramos que es nuestro deber como ciudadanos, y además nos sentimos amparados por la nueva Ley Foral 19/2019, de 4 de abril, de Protección de los Animales de Compañía en Navarra.