Pensar, proponer y salir adelante fue todo uno. No hubo muchas preguntas, por lo que deduzco que la frase "ayudar a salvar vidas" fue suficiente para que este pequeño proyecto saliera adelante. Esto solo pasa cuando lo planteas a personas que poseen una gran virtud "la virtud de la empatía" no podía ser menos trabajando en un centro de atención integral a la discapacidad. El proyecyo fue pequeño "conseguir torniquetes para salvar vidas" , pero el resultado fue grande, 2.420 (89 torniquetes) en un mes. Por ello tengo que dar las gracias a personal de atención directa, personal de servicios generales, personal técnico, una vez más, por todas y todos ellos...me quito el sombrero.

La autora es enfermera del Centro Valle Roncal (Txantea)