Larguísima situación de precariedad

Es totalmente inaceptable que nos encontremos sin el personal médico que corresponde por volumen de población. Es decir, una plaza y media de Pediatría y seis de Atención Primaria. En la actualidad disponemos de promedio de dos a tres en Atención Primaria y una en Pediatría (en esta hemos estado muchos días sin nadie). Esta situación se está alargando en el tiempo creando tensión laboral en la plantilla del centro de salud y hartazgo en las personas usuarias.

La demora en las citas y la falta de atención adecuada hace que cuando nos surge algo importante no sabemos dónde acudir y acabamos en urgencias hospitalarias a cincuenta kilómetros de distancia.

Hasta ahora la contestación de la administración del Gobierno de Navarra y de la dirección de los distintos estamentos sanitarios ha sido que hacen todo lo que está en sus manos, que en nuestro caso es muy poco, que no encuentran profesionales de medicina.

Estamos en nuestro derecho de exigir lo que nos corresponde y la dirección de Salud tiene la obligación de dar una solución adecuada y definitiva a nuestras demandas. Es por ello que consideramos su obligación de dar una explicación pública de esta lamentable situación.

Sabemos que este deterioro no se ha creado en esta legislatura ni en la anterior, pero en siete años han tenido tiempo para enderezar la situación.

No nos vale que UPN salga a denunciar lo mal que se encuentra la Atención Primaria de nuestra zona de salud porque mucho nos tememos que ha sido la causante de la mayor parte del deterioro.

No podemos dejar de mencionar al resto de pueblos de Sakana. Los pueblos de Ergoienea (Unanu, Dorrau y Lizarraga), Bakaiku y Urdiain, así como Arbizu y Lakuntza, tampoco tienen cubiertas la atención de sus consultorios médicos a nivel anterior a la pandemia, por lo que nos unimos a su queja también.

Los autores son miembros de la Plataforma Navarra de Salud / Nafarroako Osasuna Plataforma