Poco tiempo le queda a quien corresponda, a la Mancomunidad o al Ayuntamiento, ya que nunca sabemos a quién porque se pasan la pelota unos a otros, para descegar las arquetas de la ciudad ante las nieves previstas. Hoy mismo ya muchas aceras son impracticables, con balsas y badinas de agua que hacen necesaria una piragua para poder transitar por ellas.

En el propio paseo Sarasate hay pasos de cebra que no se pueden cruzar. Los mismos operarios de la Mancomunidad ya han trasladado que es porque las arquetas se hicieron sin conexión a desagüe. Las losetas de la plaza del Castillo, hundidas en muchas zonas por el paso del tiempo, no drenan y forman charcos.

En definitiva, este servicio de limpieza y atención de las arquetas es muy deficiente, y no por el buen hacer de los operarios, sino por la falta de previsión de los organismos que debieran ser competentes. La que nos espera si se cumplen las previsiones. Preparen las katiuskas y los crampones. ¡¡Y el coche en el garaje!!!